‘Upfront’, la fotografía como arma cargada de realidad

Setenta y cuatro imágenes, tres vídeos, una banda sonora, un libro y un poema forman la exposición Upfront, que se abrió ayer al público en el Centro Cultural de España de la capital mexicana.

Una original muestra sobre el trabajo de los fotorreporteros de América Latina y España más destacados, como Rodrigo Abad, Manu Brabo, Luis de Vega, Maysun, Rafael Fabrés, Ariadna Cubillos, Ricardo G. Vilanova o Esteban Félix, considerados la mejor generación de fotógrafos de conflictos de los últimos años.

23 profesionales que comparten una mirada inquisitiva y un idioma, cubriendo las heridas del mundo y la actualidad, desde Afganistán a Haití, Siria, Congo, Libia o Centroamérica. Con menos medios y más riesgos e incertidumbres sobre su futuro pero no sobre su papel, algunos han vivido el secuestro, el aislamiento, el hambre... Pero también el reconocimiento en forma de premios como los Pulitzer o el World Press Photo.

La imagen de un rebelde congoleño con los testículos en la mano de Álvaro Ybarra, la violencia en las favelas de Río de Janeiro de Fabrés, el poderoso misticismo de Haití en la lente de Cubillos y Casares o las lágrimas en Siria de Guillem Valle, se presentan al visitante como un viaje por la mejor historia periodística de los últimos 15 años.

La descarnada realidad del mundo que habitamos, se abalanza sobre el espectador en forma de originales cajas de luz suspendidas en el aire.

Sin embargo, la mejor generación de fotoperiodistas iberoamericanos se enfrenta a una realidad confusa y tecnológica que permite “que hoy se hagan más fotos en cinco minutos que las que se hicieron en todo el siglo XX”, dice el curador de la exposición, Ramiro Villapadierna.

“Es un mito que la gente joven solo consume basura por el celular, aprecian lo bueno y quieren calidad” dijo Enric Martí, jefe de fotografía de Associated Press para América Latina. Según Martí el reto para un editor hoy en día es separar el trigo de la paja. “De una rueda de prensa te llegan 3.000 fotos. Antes, cuando había que utilizar rollos había que seleccionar mucho el disparo” recordó en referencia a su cobertura en los Balcanes.

Según Martí, ganador del premio World Press Photo, en México hay grandes fotógrafos que se juegan la vida en lugares remotos ajenos al glamur y la etiqueta de los periodistas de guerra.

Para Pedro Valtierra, director de Cuartoscuro y autor de icónicas imágenes sobre la guerra en Nicaragua o el levantamiento zapatista “hoy en día la fotografía es, esencialmente, igual que hace 30 años. Cambió la tecnología pero no la mirada ni la metodología”.

Sobre la fotografía en México, Valtierra criticó que “en México se consume poca prensa porque los editores descuidaron a sus lectores y se olvidaron de los buenos textos y las buenas fotos. Hoy en día la imagen de portada de cualquier periódico es siempre de un político”, resumió.