
Quién manda hoy en el ladrillo español 15 años después de la burbuja
Quince años después de la burbuja de 2008, el mapa inmobiliario español es otro. Con menos constructoras familiares y más fondos globales y gestoras especializadas, la desconfianza persiste en plena crisis de acceso a la vivienda. Esa es la radiografía que surge de la conversación organizada por EL PAÍS con seis de los mayores dueños del ladrillo en la azotea del Club Financiero Génova.
¿Quién manda hoy? Estos actores gestionan casi 79.000 millones de euros en activos y controlan vivienda, oficinas, residencias, centros comerciales, logística y centros de datos.
- El tablero lo dominan Azora, Metrovacesa, Neinor, Hines, Colonial, Merlin, Blackstone y Pontegadea, con modelos que abarcan desde la promoción residencial hasta la inversión patrimonial o la gestión de grandes carteras.
¿Cómo ha cambiado el sector? El dominio de promotoras familiares murió con la burbuja.
- El mercado actual es fragmentado y, desde 2014, depende sobre todo de capital extranjero.
- Gestoras y fondos marcan tendencia comprando vivienda, suelos o activos tóxicos, mientras las firmas españolas se especializan en nichos concretos.
La receta para afrontar la crisis. El sector insiste en construir más, especialmente vivienda en alquiler y asequible.
- El Gobierno también apuesta por construir más, aunque insiste en que debe hacerse con vivienda asequible.
- Las empresas denuncian falta de políticas de suelo, regulación excesiva y burocracia que bloquea licencias y mantiene vacíos terrenos urbanizables.
¿Quién es quién en este sector? Brugera (Colonial), Clemente (Merlin), Gelado (Hines), Pérez de Leza (Metrovacesa), García-Egotxeaga (Neinor), Rodríguez-Heredia (Azora), Ortega (Pontegadea) y Boada (Blackstone) concentran el nuevo poder del ladrillo.
©Foto: Ximena y Sergio