¿Qué está ocurriendo en la Costa del Sol con los sicarios adolescentes?
No tienen edad para conducir ni para comprar alcohol, pero ya aprietan el gatillo de fusiles de guerra. En la Costa del Sol, la policía ha detenido a tres menores extranjeros usados como sicarios, uno de ellos tras cometer un asesinato en Fuengirola.
Contexto. Un belga de 17 años viajó desde Países Bajos a Málaga con la misión de matar a un hombre que salía de un club de cannabis. Dos horas después de aterrizar, disparó con un fusil de guerra y huyó. Es el primer asesinato cometido por un menor en España por encargo.
Un modelo importado. En Suecia, Bélgica y otros países, adolescentes de 13 a 16 años son reclutados para disparar armas, lanzar granadas o colocar bombas.
¿Por qué utilizan a menores? Porque las condenas son bajas. Un adulto se enfrentaría a décadas de prisión, mientras que un adolescente puede salir en pocos años de un centro de internamiento.
Un negocio barato para las mafias. Por unos 20.000 euros, un joven puede aceptar matar a alguien, y por menos participar en un ataque. Algunos nunca cobran y acaban extorsionados; otros quedan atrapados en un ciclo de violencia.
La respuesta policial. La policía ha evitado asesinatos y desmantelado redes, pero advierte que esto es solo el principio. La ola de sicarios adolescentes está contenida, aunque nadie sabe por cuánto tiempo.
©Foto: Policía Nacional