La eterna disputa: ¿es más listo tu perro o tu gato?
El debate entre amantes de perros y gatos tiene un capítulo eterno: ¿quién es más inteligente? Mientras los canes destacan por su lealtad y capacidad para seguir órdenes, los felinos presumen de independencia y astucia. Pero, ¿qué dice la ciencia sobre sus habilidades cognitivas?
Antes de empezar, ¿qué entendemos por inteligencia? Una de las facetas que define la inteligencia de cualquier especie es la capacidad para resolver problemas. Por ello, perros y gatos evolucionaron de modo diferente para adaptarse a contextos diferentes.
- Los perros tienen mejor capacidad para comunicarse e interactuar con las personas que los gatos, pero estos últimos tienen más destreza para sobrevivir en solitario cazando.
La conclusión es que (casi todo) depende de sus dueños: la capacidad cognitiva de los animales viene marcada por cuestiones como la genética y las experiencias, pero lo que más influye es la educación, por lo que es importante aportarles estímulos acordes a su especie.
Una frase: “La idea es que los perros y los gatos desarrollen su naturaleza, no que actúen como las personas”, explica Javier López-Cepero, psicólogo, profesor en la Universidad de Sevilla.
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