Las mejores botellas termo para conservar bebidas

Tomarte un café, una infusión o simplemente un sorbo de agua fresca a la temperatura justa (caliente o fría) de camino al trabajo o mientras prácticas deporte es muy fácil si cuentas con una botella termo. Conocida también como botella térmica o termo portátil, es un producto que utilizan cada vez más usuarios; sobre todo si pasan muchas horas fuera de casa y desean conservar la temperatura del líquido vertido en su interior en las mejores condiciones posibles. Algunas incluso indican la temperatura exacta de la bebida.

¿Qué botellas termo hemos elegido?

Con un presupuesto que no supera los 50 euros, estos son los modelos seleccionados: Create Ikohs B-Life Smart (8,25), Flintronic ‎LEU-2695025 (7,5), Qimei-Shop BWB_02 (7) y Stanley Classic Legendary (8). Al analizarlos, se han tenido en cuenta los siguientes aspectos:

• Diseño: ¿cómo es la calidad de construcción de la botella térmica y su durabilidad?
• Capacidad: aunque no es un criterio que resulte decisivo con respecto al resto, el usuario debe valorarlo también porque no todos tienen la misma capacidad.
• Extras: algunos modelos no solo conservan la temperatura de las bebidas. También ofrecen características extra como, por ejemplo, saber a qué temperatura exacta se mantienen.
• Experiencia de uso: si el termo cumple con lo prometido y preserva bien esta temperatura, si la tapa cierra correctamente para evitar posibles fugas, ¿funcionan correctamente sus características extra?, etc.

Comparativa mejores botellas termos: así las hemos probado

En las últimas semanas, hemos usado estas cuatro propuestas para comprobar cómo conservan la temperatura de las bebidas, sobre todo infusiones y cafés. Esto nos ha permitido comparar entre sí los resultados obtenidos. También nos hemos fijado en las calidades de construcción y si cuentan con características complementarias que les permitan diferenciarse del resto.

Ha sido una comparativa reñida, sobre todo porque a los productos que han obtenido las mejores valoraciones solo ‘les separan’ 0,25 puntos. La botella termo Create Ikohs B-Life Smart ha obtenido, sin embargo, la mejor valoración media final. Su diseño y experiencia de uso se sitúan entre los mejores. Además, su fabricante ha añadido dos prestaciones extra que funcionan bien: el recordatorio a modo de alarma que nos recuerda que necesitamos beber, y el semáforo de colores que informa de la temperatura de la bebida siempre que lo necesitemos saber.

Botella termo Create Ikohs B-Life Smart: nuestra elección y mejor relación calidad-precio

Disponible en tres colores (blanco, negro y rojo), mide 220 x 60 x 60 milímetros y ofrece una capacidad de 300 mililitros. Al tacto, la sensación es agradable y la calidad buena: está libre de plásticos BPA y en su fabricación se ha empleado aluminio para el exterior y acero inoxidable de grado alimenticio y doble capa para el interior; de este modo, logra que la bebida se conserve mucho mejor.

Le distingue su tapa, que incorpora en la parte superior un display táctil para saber la temperatura concreta que alcanza la bebida. Usa para ello un semáforo de colores de manera que, dependiendo de la tonalidad que refleje el anillo que rodea esta área, el resultado es uno u otro: verde hasta 36º, amarillo entre 37º y 60º, y rojo a partir de 61º. Además, la botella térmica de Create iKohs nos avisa -a través de un pitido- cada cuanto tiempo tenemos que beber gracias a un temporizador: su duración está fijada en dos horas y se programa de forma sencilla.

Para activar ambas opciones, en su caja incluye un cable USB para alimentar la batería integrada: la interfaz USB de carga se encuentra debajo de la tapa que, a su vez, cuenta con un anillo impermeable de silicona. El proceso se completa en algo más de dos horas. Como la pantalla posee un indicador de autonomía de la batería, se puede consultar en cualquier instante. La botella se puede meter en el lavavajillas para limpiarla y para la tapa basta con un trapo, ya que contiene componentes electrónicos.

Botella termo Stanley Classic Legendary: la alternativa

La firma norteamericana Stanley atesora una importante trayectoria que se remonta a 1913, cuando William Stanley Jr, su fundador, ideó una botella que combinara el acero y su aislamiento al vacío. El modelo con el que participa en esta comparativa no defrauda y desde el minuto uno las impresiones son muy buenas porque transmite una óptima sensación de resistencia ante una hipotética caída o golpe.

Con una altura de 298 milímetros y una anchura de 89 milímetros, pesa 598 gramos y su interior tiene capacidad para 750 mililitros. Como otras botellas de su clase, no contiene BPA o bisfenol A, una sustancia química que suele utilizarse en la elaboración de resinas y plásticos. Lo que sí se ha usado en su fabricación es acero inoxidable. Además, el fabricante ha aplicado un sistema de aislamiento al vacío de doble pared que ayuda a mantener la bebida (ya sea fría o caliente) un mayor número de horas. El fabricante afirma que hasta 20 horas, pero son algunas menos.

Su diseño está hecho a prueba de fugas y la tapa que incorpora se puede emplear también como vaso si el usuario no quiere beber directamente del termo. Está disponible en tres colores (verde, negro y azul) y se puede introducir en el lavavajillas.

Botella termo Flintronic ‎

Al igual que sucede con la botella térmica Create Ikohs B-Life Smart, el usuario puede consultar a través de su pantalla LED la temperatura de la bebida. Basta con pulsar unos instantes este display digital para que refleje el valor correspondiente; el resultado es instantáneo y la pantalla responde la mayor parte de las veces bien al toque de su superficie. El único inconveniente es que esta batería no es recargable (la de su oponente sí) y la pila que la alimenta tiene una duración máxima de dos años según su fabricante: por lo tanto, cuando se agote esta prestación extra no se podrá utilizar más.

Con una capacidad de 500 ml, la botella -que viene con una funda de neopreno- cumple con lo que uno espera de esta clase de productos, ya que mantiene bastante bien la temperatura varias horas. Además, se transporta de forma especialmente cómoda. A diferencia de otros modelos, solo se puede limpiar a mano -no en el lavavajillas- y la calidad de los materiales de fabricación se percibe ligeramente inferior. Otros datos de interés son: disponibilidad en varios colores, tapa de silicona a prueba de fugas (en nuestras pruebas, algunas gotas sí cayeron) y base antideslizante con óptima adherencia.

Botella termo Qimei-Shop

Con una capacidad de 380 mililitros, se siente cómoda y ligera en los desplazamientos. En dos versiones, una en marrón y otra en rosa, la primera toma de contacto es positiva: fondo de silicona antideslizante que le aporta una notable estabilidad, tapa de silicona de calidad alimentaria, doble pared de acero inoxidable, revestimiento antibacteriano… Sin embargo, lo que más llama la atención de este diseño es que la parte superior cuenta con un interruptor que funciona a modo de cierre de seguridad para evitar posibles derrames. Se bloquea y desbloquea de forma fácil, pero en ocasiones su efectividad no es la deseada porque se derrama un poco de líquido. Para beber de manera mucho más cómoda, incorpora una boquilla. Como todas las piezas son desmontables, las tareas de limpieza son muy sencillas.

¿Cómo resulta su experiencia de uso? Ya sea utilizándolo con bebidas frías o calientes, mantiene la temperatura, aunque comparando las horas que lo hace con respecto a otras propuestas, los modelos de Create Ikohs y Stanley consiguen mejores resultados y durante más tiempo.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 22 de abril de 2022.

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