Valencia, el latido magnético para una escapada todo el año
Hace mucho tiempo que trasciende a los tópicos de la paella, el sol y la playa. Valencia, la luz única que inspiró a Sorolla, combina con tino cultura, historia y gastronomía. Un lugar donde el pasado y el futuro se encuentran a diario, y cada rincón invita a descubrir algo nuevo. El proximo ‘crush’, Valencia
Es un secreto a voces que Valencia presume de un clima envidiable: más de 300 días de sol al año y temperaturas suaves que, incluso en invierno, invitan a disfrutar al aire libre. Por si fuera poco, la ciudad se encuentra junto al mar, un lujo añadido que la convierte en un destino irresistible.
En los últimos años, ha ganado popularidad como destino turístico, atrayendo a más y más viajeros cada temporada. Y lo mejor de todo: los que la descubren no pueden resistirse a volver. La accesibilidad de la ciudad es uno de sus puntos fuertes, ya que el metro conecta directamente el aeropuerto con el centro, facilitando la llegada de los visitantes.
Valencia destaca por ser una ciudad accesible y fácil de explorar. Su terreno llano y diseño accesible invitan tanto a caminar como a recorrerla en bicicleta. La ciudad ha apostado por la movilidad sostenible; cuenta con amplias zonas peatonales, una red de carriles bici que conecta el centro con la playa y la huerta y un sistema de transporte público eficiente. Este enfoque urbano promueve un estilo de vida activo y respetuoso con el medio ambiente.
Pero, lo que realmente define a Valencia es su gente, con espíritu festivo, solidario y apasionada por la buena comida: alargar la sobremesa se convierte en una verdadera tradición en esta tierra. Los valencianos reciben a los visitantes con una calidez y hospitalidad que transforman cada estancia en una experiencia única e inolvidable.
Con vistas (y sueños) al mar
En una ciudad costera como Valencia, el mar se convierte en el gran protagonista. El paseo marítimo conecta las playas de la Malvarrosa y las Arenas; es perfecto para caminar, pedalear, darse un chapuzón o, simplemente, relajarse en una terraza con vistas al Mediterráneo.
El Cabañal, el antiguo barrio de pescadores, invita a un buen paseo. Con sus casas modernistas de fachadas coloristas y mosaicos, ofrece una mezcla única de tradición y modernidad, acompañada de una animada oferta de bares y restaurantes que mantienen el ambiente festivo todo el año.
Un referente cultural de ayer y de hoy
Más allá de su costa, Valencia esconde un rico patrimonio histórico y monumental digno de ser explorado. En su centro urbano, destacan auténticas joyas como la Lonja de la Seda, una maravilla del gótico civil y Patrimonio de la Humanidad; la Catedral, que alberga siglos de historia a través de diferentes estilos arquitectónicos; las Torres de Serranos, antiguas puertas medievales que conectaban la ciudad amurallada con el exterior; y el Mercado Central, un emblema del modernismo que sigue siendo un referente gastronómico.
El Museo de Bellas Artes, la segunda pinacoteca más importante de España, alberga una impresionante colección que abarca siglos de historia. Y el recién inaugurado Centro de Arte Hortensia Herrero enriquece la oferta cultural con propuestas de arte contemporáneo
La ciudad logra una armoniosa fusión entre tradición y modernidad. Sus monumentos históricos coexisten con iconos contemporáneos como la Ciudad de las Artes y las Ciencias, un complejo arquitectónico que recorre el antiguo cauce del río Turia, o el Veles e Vents, un imponente edificio de líneas modernas que se asoma al mar.
El arte tiene un lugar privilegiado en Valencia. El Museo de Bellas Artes, la segunda pinacoteca más importante de España, alberga una impresionante colección que abarca siglos de historia. El recién inaugurado Centro de Arte Hortensia Herrero enriquece la oferta cultural con propuestas de arte contemporáneo, mientras que la Parroquia de San Nicolás, conocida como la Capilla Sixtina valenciana, deslumbra con sus frescos restaurados. Además, el IVAM es uno de los grandes referentes del arte moderno y contemporáneo nacional.
Hay vida más allá del arroz
Tras una jornada dedicada a explorar la historia, el arte y la cultura, llega el momento de disfrutar de la gastronomía. Valencia es conocida mundialmente como la cuna de la paella, pero su tradición culinaria va mucho más allá. Las numerosas variedades de arroces, preparados con productos frescos del mar y de la huerta, ofrecen opciones para todos los gustos y podrían ser el motivo de una visita cada fin de semana del año.
La oferta gastronómica de la ciudad combina lo mejor de la cocina tradicional con propuestas innovadoras, respaldadas por varios restaurantes galardonados con estrellas Michelin. Aquí, la dieta mediterránea no es solo un concepto, sino un estilo de vida que se celebra con pasión y (mucha) creatividad.
Valencia ha dado un paso gigante hacia la sostenibilidad, y lo ha hecho tan bien que ha sido Capital Verde Europea 2024
Compromiso verde
Valencia ha dado un paso gigante hacia la sostenibilidad, y lo ha hecho tan bien que ha sido Capital Verde Europea 2024. Sus parques y jardines urbanos no solo embellecen la ciudad, sino que se convierten en el pulmón verde de la capital, ofreciendo espacios de recreo y equilibrio ambiental vitales para todos.
Entre ellos destaca el Jardín del Turia, uno de los más grandes de Europa, que se extiende a lo largo de casi 10 kilómetros. Este parque, ubicado en el antiguo cauce del río Turia, es un auténtico pulmón verde que atraviesa la ciudad y conecta numerosos puntos de interés. Pasear por “el río” ⎯⎯como lo llaman los valencianos— permite descubrir lugares emblemáticos como las Torres de Serranos, la Ciudad de las Artes y las Ciencias o el Palacio de las Artes Reina Sofía, donde la naturaleza, la historia y la modernidad se dan la mano.