Razones por las que merece la pena hacer (por fin) un crucero
El buen tiempo, los días con más horas de luz y las ganas de descubrir muchos destinos (en un mismo viaje) se alistan en la cubierta de un crucero. Una experiencia nueva, distinta y plena que conviene disfrutar al menos una vez en la vida. La moderna flota de Norwegian Cruise Line (NCL), una compañía naviera experta en estilo de vida, ofrece itinerarios seductores por todo el planeta. En 2023, más de 115 de primavera y verano… por hablar solo de Europa
Año tras año, el veraneante ha avistado desde la tumbona de la playa la tentadora silueta de un majestuoso barco en alta mar en el que el relax y la mejor gastronomía, la aventura y las ganas de aprender cosas nuevas consiguen hacer de las vacaciones algo verdaderamente único. O eso le habían contado. Pero este año, por fin, ha dado el paso: es el momento de tomar esa isla móvil, de embarcarse en un crucero. En solitario, en pareja o en familia, constituye una experiencia realmente inolvidable que cuesta no repetir, y sobre la que existen muchos mitos y equívocos. Por ejemplo, que el movimiento del barco dificulta el sueño. No es cierto: se duerme mejor que con cualquier somnífero, ya que el mar mece al viajero. Tampoco hay que cambiar de hotel ni de armario, puesto que lo que se mueve es el barco, no la maleta. Y la seguridad a bordo es máxima. Eso sí, es importante elegir la compañía adecuada: asegurarse de que ofrecezca un servicio premium, un amplio espacio por pasajero y experiencias inolvidables a bordo del barco. La naviera internacional Norwegian Cruise Line (NCL), galardonada como la línea de cruceros líder en Europa, ofrece el ambiente ideal para un verano perfecto, con un concepto a bordo relajado y cosmopolita.
19 barcos hacia la felicidad
NCL cuenta con una de las flotas más jóvenes del mundo. En sus 19 modernos barcos se puede vivir una experiencia realmente única. Verano, sol, mar y total libertad: soltar amarras para unas vacaciones de ensueño solo requiere decidir la fecha. En el Mediterráneo, cuna de todas las culturas, con ese estilo de vida desenfadado como idioma universal del litoral, la historia se alía con la imponente naturaleza de los ocho puertos que tocan los barcos, de España a Egipto, de Italia a Israel o Turquía. Aguardan vistas legendarias, como los deseados miradores sobre las cúpulas azules de Santorini, ya en el recodo del mar Egeo. Todos los mares, más de 400 destinos en todo el globo, empatizan con algún crucero NCL.
El norte de Europa, ya sea en el Atlántico, por Islandia y Groenlandia o por las Islas Británicas y Noruega (cómo perderse los vertiginosos fiordos), o en el mar Báltico, los paisajes son radicalmente distintos, pero radicalmente adictivos. Culturas realmente nuevas, pero no inhóspitas, aguardan en el Círculo Polar Ártico a los cinco barcos de NCL que pespuntean sus litorales, incluido el flamante Norwegian Prima.
La palabra ‘exotismo’ se reserva glaciares, arrozales y palmeras de ensueño, de esos que alumbran el imaginario colectivo a la hora de dibujar el viaje más deseado. Lugares recónditos del planeta: de Alaska a al Caribe, pasando por Asia o Australia, la aventura NCL tiene paradas en los seis continentes. Desde anhelos tropicales como los Mares del Sur, Malasia o Hawai hasta destinos helados como Alaska, Islandia, Groenlandia o Noruega. Además de otros rumbos menos frecuentes como la Antártida y Sudamérica, Japón, Australia, el Canal de Panamá o África.
Todos los puertos europeos y las postales del mar Caribe están, por supuesto, representados en el abanico de ofertas. Todos los viajes han sido desarrollados por expertos que conocen el país y sus gentes y proporcionarán impresiones muy fiables. Este año, especialmente, hay muchas novedades. Algunos ejemplos: rutas más largas (de 9 y 10 días) por el Mediterráneo, desde Barcelona, que incluyen una noche en Livorno; una inolvidable escala en las islas Lofoten (mar de Noruega) por primera vez; salidas desde Estambul... Y dos experiencias exclusivas de NCL: destinos privados en el Caribe y saltar de isla en isla por el archipiélago de las Hawai.
6 pistas visuales para disfrutar a bordo y en tierra
Más de medio siglo haciendo realidad los sueños
NCL inició sus singladuras en 1966. Desde entonces, la naviera internacional garantiza momentos inolvidables por todo el globo: en el mar, en las excursiones en tierra y, por supuesto, durante la vida a bordo, en buques grandes y pequeños. En cubierta, en el gimnasio, en el restaurante, en el solarium… el viajero tiene la posibilidad de conocer a personas con sus mismas expectativas e inquietudes. Personas que, como él, aprecian un estilo de vida informal y relajado como el que ofrece NCL, una compañía encantada con esta diversidad. Con razón, el idioma que se predomina a bordo es el inglés.
Los barcos de NCL acaban con otro mito: la supuesta congestión en los espacios comunes. Solo NCL ofrece la libertad y flexibilidad del Freestyle Dining, sin agobios de horarios fijos de comidas ni asientos preasignados. El viajero come o cena cuando mejor le encaja, cuando vuelve de la excursión en tierra, o cuando sale del masaje o del gimnasio, sin reloj. Los barcos cuentan con hasta tres restaurantes principales, con todo tipo de especialidades y gran variedad de opciones de calidad: japonés, español, estadounidense.... Es posible disfrutar de carnes brasileñas en Moderno Churrascaria, saborear lo mejor de la cocina francesa en Le Bistró o elegir sabores mexicanos frescos en Los Lobos. Ahora, a través de The Norwegian Edge, la compañía eleva aún más el estándar de excelencia para los restaurantes, con menús mejorados y nuevos locales. Y en los nuevos barcos, el innovador concepto Indulge Foodhall se contagia de la gastronomía callejera, la tendencia que se impone en las grandes ciudades, con su diversidad culinaria.
Y sin dejar de pensar en la libertad de los más jóvenes: Freestyle Dining ofrece opciones gastronómicas capaz de satisfacer al miembro más exigente de la familia.
Dormir a gusto... y al gusto
El alojamiento también es a la carta. Existen hasta 24 tipos de camarotes para cada necesidad. Esa diversidad acaba con la falsa leyenda de las limitadas dimensiones de los viajes trasatlánticos. Oculto en la parte superior del barco se encuentra The Haven by Norwegian®, un espacio exclusivo con los más lujosos, amplios y mejor equipados. Desde allí no solo se tiene acceso a todo lo que ofrece el barco, sino que se disfruta del servicio personal de un conserje, además de un mayordomo las 24 horas. Balcón privado, solarium… Todo con ventanales panorámicos o piscinas infinitas al mar, y sin perder de vista la preciosa costa que circunvala el barco en paralelo. Inolvidable.
Entretenimiento a diario
Algunas escalas incluso pasan la noche en puerto, lo que permite disfrutar de mucho tiempo en tierra para explorar los destinos. NCL ofrece una gran selección de excursiones temáticas. El viajero elige cómo quiere experimentar el destino, ya sea con un recorrido Go Local en el que se acercará a la cultura autóctona, con otro lleno de acción para activar la adrenalina o uno eminentemente tranquilo, de hilo conductor histórico. La individualidad siempre es lo primero con NCL.
Y durante el día, si no apetece desembarcar para conocer el destino (quizá porque ya se conoce, por qué no), hay multitud de actividades para disfrutar del barco, desde karts hasta tirolina, minigolf, rockódromo y piscinas para todos los gustos y tamaños, con toboganes de agua y parques acuáticos. Y, para los de secano, un circuito pedestre de 400 metros, por si alguien echa de menos pasear el tiempo que se desee por cubierta.
Llega la noche, y el barco no solo cuenta con diligente personal en la tripulación, el servicio de limpieza o la restauración. También hay un completo equipo de artistas que cantan, bailan y logran sorprendentes números circenses. Música para todos los tímpanos y sensibilidades, con tributos a Lady Gaga, Adele, Tina Turner y Michael Jackson o Donna Summer (*), por ejemplo. Y la garantía de que nada se hace repetido: el espectáculo de mañana puede completar y competir en satisfacción con el de hoy. Los musicales importados de Broadway, como Footloose, SIX y Jersey Boys®, bien pueden definir la elección del crucero.
(*) consultar los espectáculos de cada barco.
Una clase única: Norwegian Prima y Norwegian Viva
Las nuevas incorporaciones a la flota son el nuevo dream team en alta mar Norwegian Prima y Norwegian Viva elevan el estilo de vida a bordo a un nivel nunca visto en la industria de los cruceros.
El Norwegian Prima es el primero de los seis cruceros de la clase Prima. Está diseñado pensando más que nunca en el viajero, tanto en los camarotes, más amplios, como en las zonas públicas, también generosas en espacio. Además, el Norwegian Prima es el primer barco de la flota de NCL que ofrece un atrio que se extiende en tres niveles y recuerda al MoMA de Nueva York.
Tan innovador como la arquitectura es el concepto culinario de los numerosos bares y elegantes restaurantes del Norwegian Prima, que incluyen una marisquería y un bar de sushi. Otro punto destacado es el restaurante principal, en el que disfrutar de una sensacional vista de 270° sobre la popa del barco durante la cena, o el Indulge Food Hall and Lounge, un concepto gastronómico completamente nuevo a bordo de un crucero. Ya se puede experimentar el Norwegian Prima en el Caribe, y el próximo verano arrancará en Europa.
También en verano de 2023 el Norwegian Viva se embarcará en su primer viaje, a través de varias rutas del Mediterráneo, con momentos de bienestar nunca vistos, en un ambiente elegante y de gran calidad. Reservando ahora, el viajero se asegura un 50% de descuento en el precio del crucero y de hasta 300 euros de descuento en vuelos, para cruceros seleccionados.