17 fotosEl universo interior de AndreiLa historia de un niño de ocho años y su madre boliviana ilustra la tormenta que se cierne sobre el sur de la capital con la crisis del coronavirus. Sin trabajo y en peligro de desahucio, juntos se enfrentan a la incertidumbreDavid ExpósitoMadrid - 27 oct 2020 - 17:33CETWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceAndrei, sentado junto a su madre Karen después de hacer algunos recados por el barrio de Villaverde Alto (Madrid).David ExpósitoAndrei, saliendo de su casa con la mochila para ir al colegio.David ExpósitoKaren, recogiendo su bolsa de alimentos diaria en el comedor social del barrio.David ExpósitoAndrei, haciendo los deberes en su casa después del colegio.David ExpóstitoAndrei, en su habitación, viendo algunos dibujos animados.David ExpóstitoKaren no puede permitirse tener internet en casa, de modo que para muchas actividades o simplemente para que el niño pueda jugar con el ordenador tienen que acudir al locutorio que tienen cerca de casa, que les cuesta 80 céntimos por hora.David ExpóstitoPara lavar la ropa y el resto de cosas de la casa, a principios de mes, cuando Karen ha cobrado, suelen acudir a una lavandería del barrio, que les resulta más económica que utilizar la de casa.David ExpósitoAndrei y Karen tendiendo la ropa en el patio interior de su casa.David ExpósitoFotografía de la agenda escolar de Andrei, con todos los deberes de la semana.David ExpóstitoAndrei, en la papelería del barrio donde compran el material escolar cuando pueden permitírselo.David ExpóstitoEste año Andrei comienza la etapa de catequesis, por lo que acude a misa cada domingo junto a su madre.David ExpósitoDurante los primeros meses de vida, Andrei sufrió problemas de asma y estuvo muy grave en el hospital. Mientras permanecía allí, su madre colocó un rosario blanco junto a la cuna que ahora tiene colgado en la pared de la habitación.David ExpósitoKaren y Andrei, desayunando en un bar después de acudir a misa el domingo por la mañana. En muchas ocasiones, algún vecino o incluso los propios dueños del bar que son conscientes de la delicada situación en la que se encuentran, les invitan o les dan algo de comida.David ExpósitoAndrei juega al fútbol en el patio interior de su casa.David ExpósitoAndrei, que de mayor quiere ser youtuber, jugando con el móvil de su madre.David ExpóstitoKaren y Andrei, abrazados mientras esperan a que termine de lavarse la ropa.David ExpósitoAndrei juega con el sol que se cuela por una de las calles de su barrio.David Expóstito