16 fotos
Los juguetes de los niños refugiados rohingya Un cordón de zapato, una ruleta o incluso una tapa de botella. Estos son algunos de los objetos con los que se entretienen los niños, más de la mitad de 620.000 refugiados, que han cruzado a Bangladés desde finales de agosto La niña rohingya Isha Rab, de 5 años, llegó a Bangladés en septiembre, muestra un cordón de zapato con el que juega en el campo de refugiados de Thankhali en Cox's Bazar. ED JONES (AFP) El niño huérfano Hubaib, cuya madre fue asesinada a tiros en Myanmar antes de huir a Bangladés con su familia, muestra una bola de plástico en el campamento de refugiados de Balukhali en Cox's Bazar. ED JONES (AFP) La niña inmigrante rohingya Halima Khatun, de 6 años, que llegó a Bangladesh en octubre, muestra un silbato y una cuchilla de afeitar que usa como juguetes en el campo de refugiados de Shamlapur en Cox’s Bazar. ED JONES (AFP) La niña Shawkat Ara, que desconoce su edad, enseña un colador de plástico que usa para jugar con la arena en el campamento de refugiados de Thankhali, en Cox's Bazar. ED JONES (AFP) Un niño rohingya sosteniendo un juguete giratorio en el campamento de refugiados de Kutupalong en Cox's Bazar. ED JONES (AFP) El niño rohingya Mohamed Rafiq, de 8 años, que huyó de Myanmar en octubre, sostiene un silbato de juguete en el campo de refugiados de Shamlapur en Cox's Bazar. ED JONES (AFP) El niño rohingya Abi Asad, de 3 años, que llegó a Bangladés en octubre, sostiene un juguete giratorio en el campo de refugiados de Shamlapur en Cox's. ED JONES (AFP) La niña inmigrante rohingya Rokhsana Begum, de 7 años, que llegó a Bangladés en septiembre, enseña un pequeño colador que usa para jugar en la arena del campamento de refugiados de Shamlapur en Cox’s Bazar. ED JONES (AFP) El niño Warish Shah, de 3 años, llegó a Bangladés en septiembre después de que su aldea fuera atacada, sostiene una navaja con la que juega en el campamento de refugiados de Thankhali en Cox’s Bazar. ED JONES (AFP) El niño rohingya Mohhamad Hussein, de 10 años, que llegó a Bangladesh en octubre, sostiene una jeringa desechable con la que estaba jugando en el campamento de refugiados de Thankhali en Cox’s Bazar. ED JONES (AFP) El niño migratorio rohingya Mohammad Shahed, de 4 años, sostiene una batería con la que estaba jugando en el campo de refugiados de Thankhali en Cox's Bazar. ED JONES (AFP) El niño inmigrante rohingya Mohammad Arafath de 4 años, que llegó a Bangladés a principios de septiembre, sostiene una mini trompeta de juguete en el campamento de refugiados de Thankhali en Cox’s Bazar. ED JONES (AFP) El niño Mohammad Sadek, de 5 años, sostiene un juguete giratorio de plástico que encontró en la basura, en el campamento de refugiados de Cox's Bazar. ED JONES (AFP) El niño Abdul Hafez, de 5 años, que llegó a Bangladés en septiembre, sostiene unas tapas de botellas que usa para jugar a un juego llamado 'Medakhela' en el campamento de refugiados en Cox's Bazar. ED JONES (AFP) El niño rohingya Khairul Amin, de 6 años, que llegó a Bangladés en septiembre, sostiene un pedazo de plástico que usa como pala para jugar en la arena en el campamento de refugiados de Thankhali en Cox's Bazar. ED JONES (AFP) El niño inmigrante rohingya Mohammad Rejuan, de 10 años, que llegó a Bangladesh a mediados de octubre, enseña un silbato y un trozo de tubería de plástico, que encontró en el campamento de refugiados de Thankhali en Cox’s Bazar. ED JONES (AFP)