El estacionamiento de los aviones está gestionado por Tarmac Aragón. Tarmac es una de las siete empresas que operan en las instalaciones y supone la mayor fuente de ingresos para el consorcio público que las gestiona. En la foto: el hangar de Tarmac.LUIS SEVILLANODesde su construcción, el aeropuerto de Teruel no ha gestionado vuelos comerciales. El modelo de negocio del consorcio público que lo gestiona se basa en la concesión de espacios y servicios para empresas aeroespaciales. En la foto: un empleado de la empresa Tarmac.LUIS SEVILLANOEn el Aeropuerto de Teruel los aviones que han acabado su vida útil son desmantelados y reciclados. Este tipo de actividad diferencia el aeropuerto aragonés de otras plataformas parecidas como la del desierto del Mojave (California), conocidas como "cementerios de los aviones". En la foto: un avión parcialmente desmantelado.LUIS SEVILLANOEl Aeropuerto de Teruel tiene capacidad para estacionar hasta 250 aviones. En noviembre de 2016, tras cuatro años de actividad, ha tenido 60. En la foto: las aeronaves estacionadas.LUIS SEVILLANOEl consorcio público que gestiona las instalaciones del Aeropuerto de Teruel tiene su sede en el terminal principal. En la primera planta se encuentra la escuela de vuelo británica FTA que ha empezado a operar en los cielos aragoneses en octubre de 2016. La llegada de FTA ha supuesto un incremento de las operaciones del 380% con respecto al año anterior. En la foto: un coche deja el terminal principal.LUIS SEVILLANOEl material promocional del aeropuerto asegura que en en la zona hay 242 días de sol al año. La escuela de vuelo británica FTA ofrece a sus estudiantes 80 horas de vuelo en Teruel, ya que las condiciones meteorológicas de la zona permiten ensayar el vuelo a vista. En la foto: el instructor de vuelo Iain McIness ensaña una ruta a un estudiante.LUIS SEVILLANOAl estar alejado de las rutas de tráfico aéreo, el Aeropuerto de Teruel tiene una torre de control automatizada. Los pilotos aterrizan volando "a vista" según el plan establecido por el consorcio. En la foto: una empleada en la torre de control.LUIS SEVILLANO"No tendremos pasajeros, pero tenemos espacio para expandirnos". El director general del aeropuerto, Alejandro Ibrahim, explica que, tras llegar a la autosuficiencia, el consorcio está invirtiendo en la ampliación de las instalaciones. En la foto: Alejandro Ibrahim.LUIS SEVILLANOLos ingresos registrados permiten la expansión del Aeropuerto de Teruel. En la foto: las obras para la construcción de un nuevo hangar cuyo coste ha sido de unos 750.000 euros.LUIS SEVILLANOEl Aeropuerto de Teruel tiene un almacén de combustible de 180.000 litros. El queroseno almacenado abastece a los aviones y sirve para la realización de los ensayos de la 'startup' española PLD Space, que desarrolla motores para cohetes comerciales. En la foto: el almacén de combustible.LUIS SEVILLANOPDL Space está financiada por inversores privados y por el Centro de Desarrollo Industrial del Ministerio de Economía. El pasado octubre recibió el visto bueno, y una inversión de 750.000 euros, por parte de la Agencia Espacial Europea para realizar el primer cohete reutilizable. En la foto: el banco de prueba de PLD Space.LUIS SEVILLANOEn el Aeropuerto de Teruel se encuentra también una de las bases de INAER, la empresa (recientemente adquirida por la multinacional Babcock) que gestiona el servicio de traslado sanitario de emergencia por la diputación de Aragón. En la foto: el equipo de INAER, desde la izquierda: Pedro Limonchi, enfermero; Pepe Sorribés, médico; Jorge García, mecánico y Fernando Sáenz, piloto.LUIS SEVILLANOLos bomberos Jorge Simón (a la izquierda) y Abraham Santiago presidían la pista antes de la llegada de del Airbus 340 procedente de Dubái.LUIS SEVILLANOEl Aeropuerto de Teruel tiene una extensión de 80 hectáreas y está rodeado por kilómetros de terreno agrícola. En la foto: los aviones estacionados.LUIS SEVILLANO
