¿Engañaron a Marilyn para que se suicidara?
Un director de cine australiano asegura haber descubierto un informe del FBI que lo confirma
El 5 de agosto de 1962, la actriz Marilyn Monroe -el gran mito erótico del siglo XX- fue hallada muerta en su cama, con grandes dosis de barbitúricos en el organismo. Se había suicidado. Ahora, el director de cine australiano Philippe Mora, asegura que un documento del FBI indica que la actriz fue engañada para que ingiriera los fármacos: le hicieron creer que iba a ser rescatada a tiempo. Esta información ha sido recogida por varios medios, entre otros el diario británico The Independent.
El suicido involuntario de Marilyn formaría parte de una trama para silenciar su romance con el entonces fiscal general de Estados Unidos, Robert Kennedy, nombrado por su hermano, el presidente John F. Kennedy. Además, el mismo Robert habría tenido conocimiento de la operación.
La actriz, según las fuentes, se habría dado cuenta de que Robert Kennedy no se iba a divorciar de su mujer y casarse con ella, tal y como le había prometido. Robert, además, se había desentendido de su compromiso con la actriz de que él “se encargaría de todo” cuando fue cancelado el contrato de Marilyn con la productora 20th Century Fox. La pareja intercambió, por este asunto, “palabras desagradables” a través del teléfono.
Amigos y conocidos implicados
También estarían implicados en la trama, según The Independent varios amigos de la actriz, entre otros el actor Peter Lawford (quien estaba casado con una hermana de Kennedy, Patricia), así como su psiquiatra, Ralph Greenson, la guardesa de su casa, Eunice Murray, y su secretario y agente de prensa, Pat Newcomb.
Pero, ¿por qué la actriz accedió a desempeñar su parte en la operación? El documento señala que Lawford “sabía por amigos de Marilyn que la actriz hacía a menudo tentativas de suicidio y que estaba dispuesta a cometer un falso intento de quitarse la vida con el fin de conseguir comprensión”.
Lawford se habría conchabado con el psiquiatra Greenson (quien trataba el insomnio y la adicción de Marilyn) para que éste recetara a la actriz una dosis “inusual” de barbitúricos. Fue el guarda de la casa, Eunice Murray, quien dejó las 60 pastillas de Seconal, un somnífero, sobre la mesilla de noche de Marilyn.
El periódico señala que, según el documento, aquella noche Robert Kennedy llamó a Lawford desde San Francisco “para averiguar si Marilyn ya estaba muerta”.
El actor y amigo de Monroe llamó a casa de la actriz: “Al rato volvió a hacerlo para asegurarse de que no contestaba al teléfono”, señala el informe. El documento indica que el guarda llamó después al psiquiatra para informarle de que Marilyn ya había ingerido las pastillas.
“Marilyn esperaba que le lavaran el estómago y lograr así compresión por este intento de suicidio. El psiquiatra dijo a Marilyn que iba a dar una vuelta en coche para tomar aire fresco, pero no volvió a verla hasta que se supo que había muerto”, indica el informe.
El cuerpo de la actriz fue hallado por Murray, oficialmente, a las pocas horas. En un plazo de dos días, señala The Independent, Lawford y Newcomb habían volado a un complejo propiedad de los Kennedy en Hyannisport, Massachusetts.
Un documento desclasificado
El descubridor de este documento (el director de origen francés, nacionalidad australiana y residente en Los Ángeles, Philippe Mora), señaló el sábado pasado en el periódico Sydney Morning Herald que encontró ese informe del FBI entre miles de archivos confidenciales recientemente desclasificados.
Los datos habían sido recopilados por un “ex agente especial”, cuyo nombre fue borrado. El documento lleva por título “Robert F. Kennedy”. El agente aseguró que no podía evaluar la autenticidad de la información, pero, a pesar de ello, el documento llegó a manos de cinco agentes de la máxima graduación, entre ellos Clyde Tolson, “mano derecha del jefe del FBI, J Edgar Hoover”, señala el rotativo.
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