El momento de las pymes para no quedarse atrás
Los más de 70.000 millones de euros de los fondos europeos de recuperación se deben convertir para las pymes en una oportunidad de crecimiento. Y esa oportunidad pasa por hacerse más grandes, sostenibles y digitales
Los planes de recuperación que se otean en el horizonte pueden y deben cambiar el ritmo de las economías mundiales. La pandemia no se ha ido y ha dejado su huella en forma de crisis sociopolíticas y económicas, pero la vida sigue, y la economía no puede detenerse. Los planes europeos de recuperación suponen una inyección de moral y, sobre todo, dinero para regar las secas arterias empresariales. El objetivo requiere reactivar un consumo cada vez más responsable con el medio ambiente.
Oportunidad desde la crisis
En España, las pymes representan el 99% del tejido productivo y, aunque resulte paradójico, los efectos de este fenómeno económico disruptivo llamado covid puede ser una oportunidad de oro para su resurgir. En tres años, algo más de 70.000 millones de euros deben servir para dinamizar la economía española. Una oportunidad para que las pequeñas y medianas empresas sean más sostenibles y digitales.
Tres ejes vertebrarán los futuros planes: la digitalización, una transición hacia una economía verde y la reindustrialización. Y con ellos llegan nuevos conceptos que cada vez serán más vitales en el entramado industrial: descarbonización, eficiencia energética, contaminación cero, economía circular, el internet de las cosas, reducción de CO2, salud inteligente…
Ante semejante escenario las empresas españolas están obligadas a cambiar su fisonomía. Una nueva imagen que pasa por la necesidad de incrementar su tamaño, reforzar su valor y su capitalización para mejorar las posibilidades de inversión y empleo.
Los expertos tienen distintos puntos de vista. Algunos apuestan por que los fondos europeos se conviertan en el elemento modernizador y dinamizador del tejido empresarial y que sirvan, a su vez, para acelerar la actividad emprendedora de nuestro país, que es superior a la de muchos de nuestro entorno. Sin embargo, otros creen que las pequeñas empresas no están aprovechando la proyección que significa la globalización.