El voluntariado corporativo, una eficaz herramienta contra el abandono escolar
Garantizar una educación de calidad es fundamental para el desarrollo económico y social del planeta. A este inmenso desafío las empresas pueden contribuir a través de acciones de voluntariado. La Fundación Cellnex, por ejemplo, promueve el bienestar social y beneficia a las comunidades más vulnerables. ‘Youth Challenge’, enfocado a la educación, es uno de sus proyectos
La reducción del abandono escolar forma parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), específicamente del Objetivo 4, que persigue garantizar una educación de calidad para impulsar el crecimiento económico y social sostenible, además de promover la conciencia ambiental. En esta tarea, las empresas desempeñan un papel fundamental. No solo deben ofrecer oportunidades de formación y aprendizaje continuo a sus empleados; también han de estimular su participación en actividades de voluntariado. Trabajar con colectivos en situación de vulnerabilidad, con el fin de capacitarlos y mejorar sus perspectivas de empleo, es altamente necesario.
En Cellnex, compañía de servicios e infraestructuras de telecomunicaciones inalámbricas líder en Europa, los proyectos sociales integran una parte muy importante en su agenda. La Fundación Cellnex lidera y organiza a aquellos empleados que deseen contribuir al bienestar social. “A través del voluntariado corporativo”, apuntan en la fundación, “Cellnex devuelve a la sociedad parte de su existencia, de su razón de ser, de su conocimiento, con el principal objetivo de beneficiar a sectores vulnerables que necesitan de este tipo de acciones”.
‘Youth Challenge’ beneficia a estudiantes de educación secundaria y a alumnos de escuelas técnicas y Formación Profesional, proporcionando orientación académica y cercanía al mundo laboral
Los programas de voluntariado de la compañía se extienden a tres grandes áreas: educación, formación y tutoría, mejora de la empleabilidad y acceso a la tecnología. Para medir el éxito de esta iniciativa, nada mejor que calibrar las respuestas de los empleados: el 91% valora positivamente el compromiso con el voluntariado corporativo y el 87% están interesados en participar en las acciones impulsadas por la fundación.
El voluntariado, explican en Cellnex, permite “descubrir afinidades comunes con otros empleados y sentirse parte de un proyecto común más allá de la actividad profesional habitual. Un proyecto comprometido con las necesidades sociales que incrementa la autoestima y genera un sentimiento de satisfacción por poder ayudar a los demás”. En última instancia, es un intercambio mutuamente beneficioso: mientras se forjan conexiones que fortalecen la cohesión entre los empleados y el ambiente de trabajo, también se cultiva una cultura más inclusiva. Los voluntarios adquieren habilidades y destrezas que no solo son valiosas para la empresa, sino que contribuyen a su desarrollo profesional y personal.
Apuesta por el futuro
El programa estrella de voluntariado en Cellnex es Youth Challenge, centrado en el ámbito educativo. Desarrollado en colaboración con la Fundación United Way, se centra en fomentar el interés por la educación continua y en establecer un vínculo directo con el mundo laboral, especialmente en las áreas de telecomunicaciones, innovación y tecnología. El propósito estratégico de Youth Challenge es reducir el abandono escolar entre los jóvenes en situación de exclusión social. Beneficia tanto a estudiantes de educación secundaria como a alumnos de escuelas técnicas y Formación Profesional. A los primeros se les brinda orientación académica con un enfoque en las carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), mientras que a los segundos se les acerca al mundo laboral y se les muestran las oportunidades disponibles.
En sus cinco años, Youth Challenge ha experimentado un crecimiento constante. Se ha extendido a ocho países, ha contado con la participación de más de 200 voluntarios y ha beneficiado a más de 1.100 jóvenes en 2023. “Estos datos nos hacen estar orgullosos del compromiso social y generosidad que los empleados de Cellnex demuestran participando en la iniciativa. Sin este compromiso, el programa no hubiera sido posible, por lo que hacemos público nuestro más sincero agradecimiento”, expone Àngels Ucero, directora de la Fundación Cellnex.
Cinco áreas de desarrollo
Youth Challenge se proyecta en cinco áreas clave: orientación formativa, mentorías, conferencias, talleres de aprendizaje y visitas a centros de trabajo. La orientación formativa es un encuentro donde los voluntarios comparten con los estudiantes su trayectoria formativa y profesional, mostrándoles distintos caminos y oportunidades de futuro. Las mentorías individuales (coaching), permiten a los jóvenes mejorar las competencias personales de una manera más precisa. Acudiendo a conferencias impartidas por voluntarios sobre temáticas del mundo de las telecomunicaciones, los estudiantes amplían sus conocimientos, optimizan su currículum y conocen el día a día de una empresa tecnológica puntera. Los talleres de aprendizaje permiten que los alumnos pongan en práctica conocimientos técnicos bajo la metodología de learning by doing. Por último, las visitas a las oficinas de Cellnex y otros centros ofrecen a los estudiantes una experiencia de aprendizaje completa y fomentan su interés por continuar formándose.
Los voluntarios expresan su entusiasmo por Youth Challenge. Yolanda Romero, EHS-Q Project Manager de Corporation, destaca que la experiencia “me ha brindado la oportunidad de acercarme a los jóvenes, observarlos y aprender con ellos”. Tobias Schwender, Global M&A Director, califica la vivencia como “sumamente enriquecedora, con un gran aprecio por parte de los alumnos y jóvenes. Me ha gustado mucho, no quiero perdérmelo el próximo año.”
La iniciativa de la Fundación Cellnex abarca orientación formativa, mentorías, conferencias, talleres de aprendizaje y visitas a centros de trabajo
Pero los proyectos de la Fundación Cellnex no se detienen aquí. A corto y medio plazo desean “continuar trabajando en la educación y la generación de conocimiento digital como herramientas fundamentales para la integración de grupos en riesgo de exclusión social y como impulsores de un futuro mejor”. Cellnex aspira a ampliar su impacto, tanto geográfico como en la diversidad de colectivos beneficiarios. Para lograrlo establecerán alianzas con ONGs, administraciones y empresas privadas.
Un proyecto tan inspirador como valorado
Evaluar el impacto de una iniciativa es esencial para ajustar estrategias. Según la Fundación Exit, socia de Youth Challenge en España, en el curso 2022-23, el 84% de los participantes expresaron su firme intención de seguir estudiando. Un año después, el 89% continúa su formación educativa.
Esta es la valoración de las distintas áreas por los alumnos participantes:
Mentorías. Más del 70% de los estudiantes planea continuar sus estudios. El 92% recomendaría Youth Challenge a amigos, otorgándole a su coach una calificación media de 8,9/10. Destacan especialmente la utilidad del proyecto, con una nota de 8,4/10. Además, el 75% ha descubierto nuevas opciones en educación y empleo.
Talleres. Son una oportunidad de aprendizaje práctico, aplicado y divertido que no encuentran dentro del instituto. Los estudiantes valoran al equipo de voluntariado por su ayuda para profundizar en los contenidos del taller y superar los desafíos planteados.
Conferencias y visitas. Los alumnos aprecian aprender de personas voluntarias y conocer sus actividades diarias en la empresa. Las conferencias resultan motivadoras y las visitas ofrecen una visión realista, especialmente beneficiosa para los estudiantes con perfiles más técnicos en grado medio y superior.
Orientación formativa. Los participantes se muestran contentos y empoderados después de las sesiones, donde han recibido mensajes eficaces y valiosos para enfrentar su futuro educativo.