Las baterías, aliadas competitivas y flexibles para la transición energética
Según el informe anual de Statkraft, el papel de los BESS resulta clave para la integración de la energía eólica y solar en el sistema. Pero, de cara a 2050, será necesaria una combinación de tecnologías que le aporte flexibilidad

Las energías renovables no solo son determinantes para alcanzar los objetivos climáticos de los Acuerdos de París de 2015 (limitación de las emisiones de gases de efecto invernadero), sino también para garantizar la seguridad energética y la competitividad en Europa. El sólido crecimiento global de las tecnologías verdes continúa, y se plasma en nuevos récords anuales. Sin ir más lejos, en 2024 las inversiones en energía limpia e infraestructuras alcanzaron casi el doble de las que se realizaron en combustibles fósiles a nivel mundial, según la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) y Ember, una consultora especializada en el sector.
Statkraft, primer productor renovable de Europa y líder en el mercado de PPAs (contratos de compraventa de energía a largo plazo, por sus siglas en inglés), ha publicado una nueva edición de su esperado informe Green Transition Scenarios. Lo elaboran más de 50 expertos y analistas de la compañía, que avanzan la realidad energética para el horizonte 2050. En este estudio, Statkraft muestra tres escenarios globales diferentes: desde el Green Transition Scenario –más optimista– hasta el Unrest Scenario, que supone avanzar con más retraso en la transición energética. Estos análisis reflejan distintos niveles de ambición, disrupción y cooperación, ofreciendo perspectivas sobre cómo Europa y el planeta podrían recorrer el complejo camino hacia un futuro energético sostenible.
A lo largo de 2024, la capacidad de las baterías creció más de un 50% en comparación con las instalaciones de 2023
En este contexto, el papel de los Sistemas de Almacenamiento de Energía en Baterías (BESS, por sus siglas en inglés) se consolida como un habilitador crucial, competitivo en costes y flexible para la integración de las energías eólica y solar en el sistema eléctrico. No obstante, todos los escenarios del informe muestran que, en el horizonte 2050, existirá una combinación de soluciones que aportan flexibilidad.
En el Green Scenario, la energía solar será la tecnología dominante de generación eléctrica a nivel mundial para el año 2030, creciendo entre 8 y 16 veces desde 2023 hasta el ecuador del siglo. La eólica terrestre muestra un crecimiento constante en todos los escenarios, con una capacidad total entre tres y seis veces el nivel actual.
Los esfuerzos de la UE
A medida que la energía eólica y solar se vuelven cada vez más decisivas en el sistema, su naturaleza variable hace que las soluciones de flexibilidad sean esenciales. En 2024, la capacidad de las baterías creció más de un 50% en comparación con las instalaciones de 2023. Este crecimiento seguirá en los próximos años, impulsado por la reducción de costes, el aumento de la participación de las energías renovables, una mayor volatilidad de precios en los mercados eléctricos y la creciente necesidad de equilibrar la red.
En el ámbito de la Unión Europea (UE), el estudio señala que está esforzándose por equilibrar una transición energética acelerada que reduzca la dependencia de las importaciones volátiles de combustibles fósiles, al tiempo que garantiza la competitividad de sus industrias.

Hoy en día, la UE, que depende tanto de los combustibles fósiles importados como de la cadena de suministro de tecnología renovable dominada por China, está dando prioridad a una energía más limpia, de producción local y que contribuya a la independencia energética.
Los decisivos centros de datos
Este análisis, que elabora todos los años Statkraft, hace también referencia a los centros de datos como una nueva fuente de crecimiento en el consumo eléctrico. Según la IEA, la demanda eléctrica de los centros de datos podría alcanzar los 945 teravatios-hora (TWh) en 2030, y en un escenario de alto crecimiento, superar los 1.700 TWh en 2035. Para mercados eléctricos maduros, como la UE, los centros de datos representan la primera fuente nueva de crecimiento acelerado en la demanda eléctrica en décadas, poniendo a prueba la resiliencia de las redes y sistemas energéticos.
En Europa, los mercados cercanos a centros tecnológicos o financieros han sido los de mayor crecimiento hasta ahora. Pero a medida que se acelera el desarrollo, muchos de los mercados tradicionales topan con escasez de acceso a energía y capacidad de red, lo que ha impulsado el crecimiento en nuevas regiones, como los países nórdicos y la península ibérica.
Según el informe, la eólica terrestre seguirá creciendo hasta una capacidad entre tres y seis veces el nivel actual
Statkraft, empresa de origen noruego, está presente en España desde 2018. Actualmente, avanza con una cartera de más de 1,6 gigavatios (GW) renovables en desarrollo, y cuenta con 650 megavatios (MW) fotovoltaicos y eólicos en operación, además de gestionar 730 MW solares de terceros. Entre sus objetivos en nuestro país destacan el despliegue de nuevos proyectos renovables y el impulso de proyectos de almacenamiento energético, a través de la instalación de baterías en instalaciones solares y eólicas o en proyectos stand-alone, que incrementarán la flexibilidad y la garantía de suministro de nuestro sistema eléctrico.
Además, la compañía trabaja en su segunda repotenciación eólica, en un parque en Navarra, y seguirá avanzando con el resto a medida que vayan cumpliendo años sus parques eólicos en operación.