Una aplicación para presentar la declaración desde casa y conseguir los máximos beneficios

Poco importa si el ciudadano ha ganado los 22.000 euros que marcan el mínimo para hacer la declaración de la renta o si compró criptomonedas, la gran novedad de este año a la hora de rendir cuentas con el Estado: en primavera, un imperativo universal reconcome con mayor o menor insistencia al declarante. Hay que pedir cita, recopilar papeles. Con lo sencillo que sería tener una buena ayuda... Muchas veces, son las propias dudas las que invitan a retrasar el delicado momento. ¿Qué desgravará? ¿Habrá algo nuevo? Y la verdad es que siempre hay novedades.

Las reformas para mejorar la eficiencia energética del hogar, la compra de material escolar o la llegada de un nuevo miembro a la familia son algunas de las 220 deducciones fiscales existentes en esta campaña de la renta. Muchas veces no se incluyen en la declaración o se hace de forma incorrecta. Por comodidad o por desconocimiento, muchas personas no saben cómo proceder en estos casos. Según la encuesta de Competencias Financieras (ECF), realizada por el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la nota media de los españoles en conocimientos financieros es de un seis sobre diez.

La declaración de la renta no solo es un proceso en el que nosotros cumplimentamos los impuestos, también representa la oportunidad de decirle al Estado qué cosas han sucedido en nuestra vida y cómo de importantes son

Manuel Arianoff, director general de Taxfix en España

Este proceso también permite a Taxfix detectar las variaciones más significativas que hayan ocurrido en el último año (un cambio de vivienda o el nacimiento de un hijo, por ejemplo) y que puedan ser susceptibles de deducciones. “Hay que tener en cuenta que la declaración renta no solamente es un proceso en el que nosotros cumplimentamos los impuestos, también representa la oportunidad de decirle al Estado qué cosas han sucedido en nuestra vida y cómo de importantes son”, apunta el director general de Taxfix. Taxfix se consolida en España para echar una mano a los contribuyentes en la gestión de sus impuestos de cara a la próxima campaña. Ofrece un servicio digital -disponible en web y para aplicación móvil- que permite hacer la declaración de la renta desde casa y con la asistencia de expertos. “Queremos ayudar a que las personas tengan el control y la propiedad de sus finanzas”, explica Manuel Arianoff, director general de Taxfix en España. “Por eso, hemos construido una herramienta que prioriza la seguridad y la transparencia”.

Sencillez y personalización

Si hay algo que define a Taxfix es la sencillez. “Esta característica representa el core de nuestra solución”, explica Arianoff. El primer paso para acceder a sus servicios es crear una cuenta de usuario en una de sus plataformas. El registro resulta totalmente gratuito, y se realiza en línea. A partir de ahí y mediante un proceso de chat, la solución verifica la información que ha obtenido de Hacienda (la compañía es Colaborador Social de la Agencia Tributaria).

Este proceso también permite a Taxfix detectar las variaciones más significativas que hayan ocurrido en el último año (un cambio de vivienda o el nacimiento de un hijo, por ejemplo) y que puedan ser susceptibles de deducciones. “Hay que tener en cuenta que la declaración renta no solamente es un proceso en el que nosotros cumplimentamos los impuestos, también representa la oportunidad de decirle al Estado qué cosas han sucedido en nuestra vida y cómo de importantes son”, apunta el director general de Taxfix.

Se inicia entonces un proceso de conversación, de escucha activa: en función de las respuestas del cliente, la empresa realiza las preguntas adecuadas. “Este proceso -asegura Arianoff- nos permite conocer mejor a las personas. Utilizando un lenguaje lo más sencillo posible, obtenemos la información más relevante para nuestros clientes. Muchas veces no comparten estos datos porque desconocen que son importantes”.

Todo este proceso es totalmente individualizado. “Nuestro valor reside en entender la situación de cada cliente”, revela Arianoff. Además de acompañar a las personas en la confección de la declaración, “Taxfix permite que se conviertan en propietarias de sus finanzas, que aprendan del proceso para que, en un futuro, puedan gestionarlas de una forma diferente”, sostiene el directivo. Una vez concluye este flujo interpelativo, y como paso previo a que los expertos fiscales de Taxfix reciban y evalúen la información, llega el momento del pago. En total, 39,99 euros por declaración.

Confianza tecnológica

Cuando la declaración está finalizada, los expertos fiscales de Taxfix avisan al cliente a través de la aplicación, para que compruebe qué cambios se han hecho respecto al borrador y si lo desea, presentarla con un clic. Este documento, además de indicar la cantidad a devolver o a pagar, sirve para que la persona advierta (y entienda) las diferencias que hayan podido producirse entre el borrador inicial proporcionado por Hacienda y la declaración final. Si el cliente está de acuerdo, puede enviar la declaración directamente a la Agencia Tributaria desde la aplicación móvil o la web de Taxfix. En caso contrario, podrá solicitar el reembolso, ya que la compañía prima ante todo la satisfacción del cliente.

El 90% de las consultas por email se contestan en 12 horas; si el canal es chat o WhatsApp, la respuesta se da en unos minutos; la asistencia telefónica es de 120 segundos aproximadamente, y los comentarios son moderados en los medios sociales, en apenas 12 horas

Durante todo este proceso, confidencialidad y seguridad son dos requisitos imprescindibles. “La cultura de la compañía acerca de la seguridad es muy firme. Los datos están encriptados y no todo el mundo puede acceder a ellos. Trabajamos con información sensible y, por eso, la privacidad constituye un valor fundamental”, recalca Arianoff.

Respuestas en escasos minutos

Uno de los aspectos que más valoran los clientes cuando se trata de asuntos fiscales es la figura del asesor. “Que haya alguien ahí con quien poder comunicar en caso de duda, saber que hay una persona detrás del detrás del proceso, resulta muy relevante”, sostiene el directivo. “Por eso, para nosotros es vital responder las preguntas con la mayor rapidez posible”. El 90% de las consultas remitidas por email se contestan en 12 horas; si el canal es chat o WhatsApp, la respuesta llega en unos minutos; la asistencia telefónica se da en 120 segundos aproximadamente, y los comentarios son moderados en los medios sociales, en apenas 12 horas.