La línea ICO para las comunidades será de hasta 15.000 millones

El Gobierno ha aprobado el Decreto que permitirá la creación de una línea de financiación del Instituto de Crédito Oficial (ICO) de hasta 15.000 millones de euros para que las comunidades autónomas puedan pagar sus deudas y paliar así sus graves problemas de liquidez.

El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha anunciado que el Gobierno ha acordado poner en marcha una línea ICO de financiación de 10.000 millones, que será ampliable hasta 15.000 millones previa aprobación del Consejo de Ministros. Esta línea, dirigida a las comunidades autónomas, dispondrá de dos tramos: Uno para hacer ...

El Gobierno ha aprobado el Decreto que permitirá la creación de una línea de financiación del Instituto de Crédito Oficial (ICO) de hasta 15.000 millones de euros para que las comunidades autónomas puedan pagar sus deudas y paliar así sus graves problemas de liquidez.

El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha anunciado que el Gobierno ha acordado poner en marcha una línea ICO de financiación de 10.000 millones, que será ampliable hasta 15.000 millones previa aprobación del Consejo de Ministros. Esta línea, dirigida a las comunidades autónomas, dispondrá de dos tramos: Uno para hacer frente al pago de las facturas pendientes con proveedores de obras y suministros cuya deuda haya sido contraída antes del 1 de enero de 2012. El otro tramo permitirá a las autonomías hacer frente a sus deudas financieras anteriores al 1 de enero de 2012 y que hayan sido contabilizadas previamente como déficit. Esta última tendrá un vencimiento de 11 meses.

"No es una línea de liquidez incondicional", ha advertido el ministro durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. De Guindos ha precisado que la línea ICO pretende dar facilidades a las comunidades para que cumplan con el objetivo de estabilidad presupuestaria. Y también ha explicado que el segundo tramo de la línea tiene un fin financiero [permitir la financiación de los déficits], para lo cual se obligará a las regiones que envíen al Ejecutivo central un informe detallado de las operaciones de endeudamiento.

Se trata de una de las medidas para aliviar los problemas de liquidez de las comunidades autónomas que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, planteó en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, el órgano de interlocución de todos los consejero de Hacienda con el Gobierno, celebrado hace un par de semanas. Los Ejecutivos regionales que acudan a este sistema de financiación para poder pagar las facturas pendientes estarán obligadas a presentar un severo plan de viabilidad económico-financiero.

De Guindos ha precisado las características de estos préstamos que tendrán un diferencial de 225 puntos básicos sobre el tipo de interés de referencia para el tramo de pago a proveedores. La tasa de rendimiento para afrontar la deuda financiera es de 175 puntos sobre el tipo de referencia y tendrán un vencimiento único de 11 meses.

El ministro ha insistido en "las condiciones muy estrictas"  de carácter fiscal y financiero para las comunidades que accedan a estos créditos. Las regiones tendrán que aceptar un seguimiento por parte del Gobierno, para controlar el nivel de endeudamiento y las obligaciones de pago a proveedores, y adoptar medidas de ajuste para garantizar que cumple los objetivos fijados en la Ley de Estabilidad Económica y Sostenibilidad Financiera aprobada la semana pasada.

El Gobierno, además, se reserva unos mecanismos de sanción para las autonomías que se acojan a estas líneas de financiación del ICO. Si detecta incumplimiento por parte de alguna podrá pedir anticipadamente la cancelación de las operaciones financieras con cargo a esta línea. Además, los intereses y las comisiones estarán cubiertos con las retenciones a efectuar a favor del ICO del 25% de los recursos del sistema de financiación.

La línea de financiación del ICO no computa como un aumento de la deuda pública puesto que el Instituto de Crédito Oficial acude al mercado para emitir deuda y se comporta como una institución financiera, según precisó el ministro Montoro la semana pasada.