Las dudas sobre Grecia y el temor a un impago arrastran a los mercados
La presión contra los bonos soberanos griegos marcan nuevos récords y la prima española alcanza sus máximos anuales.- El Ibex cede un 2% y vuelve a perder los 10.000 puntos
Las Bolsas a la baja, el euro perdiendo posiciones y la presión contra la deuda de los llamados periféricos del euro aumentando a máximos anuales. Este es el panorama que ha dejado la falta de avances en la reunión extraordinaria que los países que comparten la divisa común celebraron ayer en Bruselas para evitar que Grecia caiga en el abismo. Sin acuerdo sobre cómo incorporar al sector privado en el segundo rescate de Atenas, que a un año de la puesta en marcha del primer plan de ayuda sigue amenazada por el riesgo de impago, y con el futuro del Gobierno de Yorgos Papandreu en el aire, los inversores están optando por deshacer posiciones en todos aquellos valores que se puedan ver afectados por este fenómeno extremo. Y no son pocos.
La vicepresidenta económica del Gobierno español, Elena Salgado, ha explicado que la reunión del Eurogrupo era "informal" y no estaba previsto que tomara ninguna decisión. Por eso y porque no hubo rueda de prensa a su término, se dio la impresión de que no hubo acuerdo, ha justificado Salgado antes de defender que sí que los hubo y que quedarán plasmados en la próxima reunión del Consejo Europeo del día 23. De hecho, ha avanzado que habrá consenso sobre la participación del sector privado en el segundo plan de rescate en la próxima semana.
Pese a las aclaraciones que han lanzado los Gobiernos sobre el evento de ayer, los inversores han optado por hacer más caso al aumento de la incertidumbre que genera el hecho de que sigue sin haber una solución próxima para Grecia. En los mercados de renta variable, los principales índices europeos han cerrado la sesión en rojo y con la banca en posición destacada entre las pérdidas. Sobre este punto, la agencia de calificación crediticia Moody's ha situado en revisión para una posible rebaja las notas de solvencia de los tres principales bancos franceses, Credit Agricole, BNP Paribas y Société Generale por su exposición a la deuda, tanto pública como privada, de Grecia. También la banca alemana aparece entre las más expuestas a la deuda soberana griega, que asciende a 340.000 millones, más de un 150% del PIB. El principal tenedor de sus bonos, sin embargo, es el BCE.
Por este motivo, en caso de impago, "el BCE podría tener serias complicaciones, los bancos griegos quebrarían necesitando un rescate que el Estado Griego no puede concederle, los bancos alemanes y franceses se verían fuertemente afectados y el efecto bola de nieve llegaría hasta EE UU donde sus bancos son los principales emisores de CDS griegos (credit default swaps, seguros contra impago). Por no hablar del efecto contagio hacia el resto de países de la periferia" entre los que se encuentra, ha explicado la analista de IG Markets Soledad Pellón.
Ante este panorama, las pérdidas han ido cogiendo fuerza a medida que avanzaba la sesión y, al cierre, han alcanzado el 1,97% en el español Ibex 35, con lo que el selectivo ha vuelto a ceder la cota psicológica de los 10.000 puntos que logró en el día anterior gracias a un "mero rebote técnico", según la analista de IG Markets. Mañana abrirá en 9.933 enteros, lo que significa que ha regresado a los mismos niveles que tenía a mediados de enero. En el resto, los recortes han sido del 1,2% en el Dax de Fráncfort, del 1,4 en París y del 0,95% en Londres. La Bolsa de Atenas se ha dejado un 2,15% y Lisboa un 2%. También han ayudado a impulsar los números rojos los malos datos que se han conocido en Estados Unidos sobre manufacturas y producción industrial. Al final de la sesión en Europa, el Dow Jones se depreciaba un 1%.
En la deuda, la rentabilidad exigida por los inversores para entrar en los bonos de Grecia, que tras caer al nivel de bono basura hace unas semanas fue rebajada el lunes por Standard & Poor's al nivel más bajo entre todos los países que tienen calificación, ha vuelto a marcar máximos desde que el país entró en el euro en 1999. A media sesión, el interés de sus títulos a 10 años alcanzaba el 17,8%. Por culpa de este repunte, la prima de riesgo, que es el diferencial frente a los bonos al mismo plazo alemanes, de referencia (que han bajado del 3%), se iba sobre los 1.490 puntos básicos. Los bonos a menos plazo, a dos y tres años, se intercambiaban en el mercado secundario a unos intereses nunca vistas hasta la fecha del 28%.
Hoy Grecia afronta su tercera huelga general en lo que va de año. Además, Standard & Poor's ha rebajado en tres escalones la calificación de los bancos griegos NBG, EFG, Alpha y Piraeus, desde B hasta CCC, tal y como hizo el lunes con la nota crediticia del Estado griego por la posibilidad cada vez más cercana, en opinión de la agencia, de un impago.
Según el Financial Times, que ha tenido acceso a un informe distribuido ayer por el Gobierno alemán en la reunión, los países del euro deberían poner sobre la mesa otros 20.000 millones de euros para recapitalizar a las entidades griegas. Este dinero se sumaría a los fondos del segundo plan de ayuda. Aunque la cifra no está cerrada, las previsiones apuntan a que superará los 90.000 millones, que es el capital que necesita Atenas para garantizar sus compromisos de pago hasta finales de 2013. El primer rescate, puesto en marcha hace ahora un año con 110.000 millones, se ha mostrado insuficiente para permitir al país volver al mercado en el plazo calculado (2012).
Tampoco han ayudado a superar las dificultades la falta de cumplimiento de los objetivos de reducción del déficit marcados y la tardanza en aprobar el segundo paquete de medidas de austeridad, que debe tener el visto bueno del Parlamento antes del 29 de este mes para que la UE y el FMI autoricen el pago de 12.000 millones que necesita Atenas de forma urgente para pagar a sus acreedores a final de junio y principios de julio.
También subía la prima de España, que lo hacía en la misma línea que la italiana, con un repunte de 13 puntos básicos hasta tocar los 260 por primera vez en lo que va de año. El bono español a 10 años también ha alcanzado máximos en su cotización intradía y ha llegado al 5,56%, con lo que de nuevo se mueve en los niveles más altos desde que el país entró en el euro. La prima de Irlanda también se movía hacia arriba y rozaba los 850 puntos básicos.
En el caso de Portugal, sin embargo, se moderaba la presión de los accionistas coincidiendo con una emisión del Tesoro luso que ha salido mejor de lo esperado, al lograr reducir la rentabilidad de sus títulos. El Fondo de Estabilidad Financiera Europeo, que es el que debe librar el dinero de su rescate, ha anunciado hoy que ya ha realizado una emisión de 5.000 millones en bonos a diez años a un interés del 3,49 % para financiar el primer desembolso de la ayuda a Lisboa. "Los malos datos macro y las posturas encontradas entre diferentes miembros de la Unión Europea y BCE sobre el rescate de Grecia han sido suficientes para eclipsar la buena noticia de Portugal", ha analizado Pellón.
En las divisas, el euro marcaba su nivel más bajo en lo que va de mes al volver a caer a los 1,42 dólares. Hasta las 15.00 había perdido un 1,22% de su valor frente a la divisa estadounidense.
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