Sindicatos y patronal se reúnen para desbloquear la reforma laboral

Los secretarios generales de CC OO y de UGT, Cándido Méndez y José María Fidalgo, y el presidente de la CEOE, José María Cuevas, se reunieron anoche para "intercambiar opiniones" sobre la reforma laboral, ver "qué obstáculos hay" y las fórmulas para superarlos. Los tres compartieron mesa y mantel para acercar posturas en el complicado tema de la reforma del mercado de trabajo.

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha asegurado que se tratataba de una reunión "discreta" y "necesaria" y que deberá ir seguida próximamente de otra con el Gobierno, el tercero de los interlocutores con el que patronal y sindicatos están negociando la reforma del mercado de trabajo. De hecho, la discreción es la premisa de las negociaciones de la reforma laboral que esta anoche reunió a los secretarios generales de CC OO y UGT y al presidente de la CEOE.

De los resultados de esta reunión podría depender la convocatoria posterior de un encuentro a tres bandas con el Gobierno como demandan los sindicatos. Hasta el momento, aunque las posiciones están distanciadas y se produce cierto estancamiento en la negociación, las esperanzas están altas.

La postura del Gobierno

Los sindicatos siguen pidiendo encuentros tripartitos y lamentan que el Ejecutivo no se haya decidido a presentar por escrito sus propuestas, algo que el Ministerio dirigido por Jesús Caldera prefiere retrasar hasta que las posturas de las partes reflejen avances suficientes y sustanciales. Lo que sí tiene claro el Gobierno es que lo importante es conseguir un buen acuerdo fruto del consenso y el diálogo entre todas las partes sin que el calendario sea un premisa inexcusable para que se llegue al final a un acuerdo favorable. El secretario de Estado de Economía, David Vegara, ha afirmado este miércoles que la reforma se realizará por consenso y que si no hay ningún avance, el Gobierno tomará sus decisiones, aunque ha asegurado que esto no significa que vaya a aprobar la reforma por decreto.

Reducción de la temporalidad

Respecto al estado de la relación, Méndez niega que se trate de una situación de "bloqueo", aunque ha reconocido que existe una situación "compleja" y que se está en un momento de "ajuste fino".

"Las visiones que tenemos que conciliar son distantes", reconoce Méndez, quien ha afirmado que los sindicatos demandan que se reduzca la temporalidad frente a la "excesiva desregulación de las subcontratas", mientras que la patronal "quiere seguir incidiendo en el factor costos laborales que, a nuestro juicio, no son un problema en nuestro país, sino una ventaja comparativa clara".

Ahora de lo que se trata, ha dicho Méndez, es de incorporar a la flexibilidad que existe mayor seguridad y calidad en el empleo, lo que significa introducir algunos elementos de regulación. Esto conlleva un esfuerzo por parte de la patronal y los sindicatos para encontrar un "equilibrio", pero "también del Gobierno, en lo que le corresponda".