El PSOE andaluz atribuye su "debate apasionado" al liderazgo de Griñán

Negar la mayor. Esa fue la respuesta de la número dos del PSOE andaluz, Susana Díaz, a la pregunta sobre la enorme batalla que se ha librado en los congresos provinciales de su partido para elegir a los delegados del 38º congreso, que se celebrará en Sevilla los días 3, 4 y 5 de febrero. Tras la reunión del pleno de la ejecutiva, Díaz dijo que los llamados congresillos no han sido para nada convulsos, muy al contrario: relativamente "tranquilos", y atribuyó el "debate apasionado y vivo" -que ha trascendido a la opinión pública como una monumental bronca- a la fortaleza del liderazgo de su secretario general, José Antonio Griñán. "Cuando un líder es fuerte, facilita el debate y la democracia de su organización", recalcó.

Susana Díaz asegura que la cúpula se mantiene por ahora neutral

La convención programática coincide con el congreso del PP

La secretaria de Organización del PSOE regional no quiso "confirmar ni desmentir" la supuesta afinidad de la cúpula andaluza con la opción de Carme Chacón e insistió en la posición de neutralidad, a la espera de ver qué es lo mejor para Andalucía. "En su momento habrá un pronunciamiento", reiteró, pero -como en anteriores ocasiones- dejó la interpretación de esta palabra en el aire, y se negó a aclarar si ese pronunciamiento incluye el apoyo explícito a Alfredo Pérez Rubalcaba o Carme Chacón.

Los socialistas han designado este fin de semana a los delegados en los ocho congresos provinciales, en tres de los cuales (Cádiz, Almería y Málaga) se han presentado dos listas, mientras en los otros cinco (Sevilla, Jaén, Granada, Huelva y Córdoba) se llegó a una lista de "consenso". Un consenso que, como en el caso de Sevilla, se ha cerrado en falso por la cercanía de las elecciones autonómicas del 25 de marzo -y muy especialmente porque es el candidato (Griñán) quien encabeza esta lista-.

Como era de esperar, Susana Díaz trató de convertir la necesidad en virtud, de modo que transmutó las palmarias divisiones entre las distintas familias en una muestra de la "viveza" de la organización, y los conflictos y descalificaciones que algunos dirigentes han contado con detalle en "debates apasionados". Igualmente, aunque se ha visto cómo el predicamento de Griñán no ha sido precisamente eficaz a la ahora de atemperar algunos ánimos exaltados, Díaz le dio la vuelta a la evidencia y buscó un argumento ventajoso. "Cuando un líder es fuerte facilita la democracia y la participación. Tras el debate queda claro que el partido está con Griñán", sostuvo una y otra vez como única contestación a la pregunta de si se ha visto dañada la imagen del secretario general y presidente de la Junta.

La número dos socialista se cerró también en banda y no admitió la existencia de fractura alguna en Sevilla, pese a que ella misma ha sido una de las protagonistas y el congreso se ha saldado con la ruptura de su alianza personal y política con el secretario provincial, José Antonio Viera. Y es que lo que se dirimió el sábado fue más allá de la rivalidad entre los partidarios de Rubalcaba y Chacón: la disputa fue por el control futuro del partido en Sevilla, que según las fuentes consultadas, está abierto y no se resolverá hasta después de las elecciones autonómicas.

Susana Díaz dijo ayer que el liderazgo de este dirigente en la provincia nunca ha estado en cuestión e incluso mostró su "satisfacción" por el resultado del cónclave. "Se trataba de elegir a los 55 delegados que representarán a la agrupación. No he asistido a los debates de esa dirección provincial, si lo hiciera, incurriría en una actitud que no se corresponde con la que he mantenido en estos días", aseguró.

En cuanto al reparto de los apoyos de los 234 delegados que aportará Andalucía al congreso, las versiones difieren según se pregunte a un grupo u otro, de forma que ambos se atribuyen la mayoría. Como en los otros asuntos, la secretaria de Organización pasó de largo y volvió a hablar de libertad y democracia, "que siempre enriquece, cohesiona y no separa".

Mientras Chacón estará hoy en Jerez, Rubalcaba tiene previsto viajar a Jaén.

La ejecutiva socialista está diseñando ya su estrategia electoral. Los días 17 y 18 de febrero celebrará una convención autonómica en Málaga, que coincidirá con el congreso nacional del PP en Sevilla. Del cónclave saldrán las grandes líneas del programa electoral.