Visionarios, 20 años después

Hartos de que cualquier conversación referida a las revistas incorporara la palabra recortes, los responsables de una atípica publicación decidieron hacer justo lo contrario. Para celebrar el 20º aniversario de su nacimiento, Visionaire ha lanzado un número bajo el título Larger than life (Desmesurado). Se trata de la revista más grande jamás editada, según el Libro Guinness de los Récords. Mide dos metros de alto por uno y medio de alto y se tirarán 250 ejemplares con un precio a la misma desmadrada escala: 1.500 dólares (unos 1.130 euros). Una versión más fácil de manejar estará disponible por 245 euros. "Es una celebración de las revistas en un contexto difícil", explica Stephen Gan, uno de sus fundadores. Se fijaron hace dos décadas el reto de sorprender en cada número. Una cápsula que reproducía el olor del pan recién hecho o un ejemplar en blanco que mostraba sus contenidos al exponerse al sol han sido algunas de sus ocurrencias. Richard Prince, Adrià, Karl Lagerfeld o Tàpies figuran en la ecléctica lista de colaboradores.

Stephen Gan lanzó Visionaire en 1991 junto al maquillador James Kaliardos y la exmodelo Cecilia Dean, cuando los tres estudiaban en la escuela Parsons de Nueva York. Hace 11 años, el proyecto se amplió con una publicación más accesible y ortodoxa, llamada V Magazine. En 2009 se creó V Spain. El próximo número de la edición española une, por primera vez, el universo de Visionaire y el de V. En una edición bilingüe y utilizando dos tipos de papel, se repasa la historia de cada cabecera. "Nunca había querido mezclar las publicaciones", afirma Gan. "Porque la gente todavía las confunde. Pero era el momento apropiado para detenerse. Hay quien lo llama antología o grandes éxitos. No lo sé".

La portada del número 11 de V Spain muestra a Lady Gaga sobre el gigantesco y último Visionaire, que ella protagoniza, en un enrevesado ejercicio metalingüístico. En la adversa situación que atraviesa el mercado editorial, V Magazine ha recuperado notoriedad. Ha fichado a Lady Gaga como columnista y a la antigua directora de Vogue Paris Carine Roitfled, como estilista. "Somos una isla muy pequeña, pero segura", afirma Gan. "Me identifico con el propietario de un teatro y mis colaboradores son los artistas".