La auditoría pone reparos al 18% del gasto de Valencia

El Ayuntamiento de Valencia gestiona el presupuesto de forma poco transparente. Los socialistas han exprimido la auditoría de las cuentas municipales de 2010 y concluyen que la intervención ha puesto "graves reparos" a la tramitación de contratos por valor de 122 millones de euros, el 18% del gasto del Consistorio. "La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, no solo paga tarde a las empresas y no reclama el dinero que le debe la Generalitat, sino que se salta los procedimientos de contratación", denunció ayer el edil socialista Pedro Sánchez.

La auditoría reclamó al Gobierno local, a modo de muestra, 750 de un total de 14.400 expedientes para revisar si los procedimientos se tramitan conforme a las leyes de Haciendas Locales, Contratos Públicos y Subvenciones, y 80 de estos expedientes o estaban incompletos o directamente no se entregaron.

Grau dice que no hay reparos graves y se justifica el dinero gestionado

Sánchez enumeró algunas de las pegas que recoge la auditoría. Por ejemplo, en la concesión de subvenciones, transferencias o aportaciones, un 13% de los expedientes revisados tienen reparos porque, o no se justifican o se justifican solo parcialmente. "Son más de tres millones de euros concedidos con irregularidades", denunció el concejal socialista. Desde 2003, el Ayuntamiento tiene pendiente aprobar un plan estratégico de subvenciones donde se especifiquen "plazos de concesión o costes previstos".

Con las inversiones ocurre otro tanto. Algunos gastos en este capítulo se han librado sin procedimiento de contratación o con insuficiencia de informes técnicos. "Aquí es donde hay un mayor porcentaje de expedientes tramitados de forma incorrecta. Son fallos que se repiten todos los años", agregó.

Según Sánchez, el Consistorio no reserva fondos del presupuesto para la iluminación de fiestas como las Fallas, las de Navidad, Moros y Cristinos y ocasiones parecidas. "Si lo hacen año tras año, ¿por qué no lo presupuestan?", dijo el concejal que achacó a esta forma irregular de gestión que el Consistorio apruebe cada dos por tres reconocimientos de crédito extra para hacer frente a estas facturas. La auditoría ha detectado en 27 casos sin autorización de gasto o sin cobertura presupuestaria.

En gastos inferiores a los 3.000 euros, el 22% o se tramitó sin autorización o fiscalización previa. "Dos expedientes son graves", describió Sánchez, "al tratarse de pagos repetitivos a proveedores que hubieran requerido contratación". El edil añadió que vista la gestión del PP en la depuradora de Pinedo -cuyo saqueo se juzga en los tribunales- y la subida de más del 150% de la tasa de basuras por parte del Emtre, el Gobierno de Barberá debería esforzarse más por ser transparente.

El vicealcalde de Valencia, Alfonso Grau, replicó a través de una nota de prensa que no ha habido ningún reparo grave de la auditoría al Gobierno local. "Sí puede haber defectos de trámites administrativos, pero en ningún caso hay irregularidades contables", dijo el número dos de Barberá en el Consistorio.