Orozco sobre su imputación: "Me siento perseguido de forma injusta"

"Me siento perseguido de una forma injusta. No solo yo, sino también otros compañeros de mi equipo de gobierno y los funcionarios del Ayuntamiento". El alcalde de Lugo, el socialista Xosé López Orozco, compareció ayer ante la prensa tras conocer en plenas vacaciones en Barcelona que tendrá que declarar como imputado por prevaricación en el juzgado de instrucción número 1, tras una denuncia presentada por la Asociación para la Legalidad Urbanística (Alpul). Este colectivo acusa a Orozco de delinquir en la concesión de pluses de productividad a tres funcionarios que participaron en la elaboración del Plan Xeral de Ordenación Municipal, un documento que fue validado por la Xunta en un 95% de su contenido.

"A mí me votaron los vecinos y tendrán que ser ellos los que me echen", afirmó

El regidor socialista, que se autoproclamó "Orozco primero el investigado". Y pidió que se investigue a la asociación denunciante, que presentó hace meses otra querella contra él por injurias, aunque fue archivada. "Que se investigue cuándo nació. ¿El urbanismo nace hace tres años en esta ciudad? Miren que lleva tiempo haciéndose urbanismo en Lugo. Que se investiguen los fines que persigue la asociación", reclamó.

Orozco admite que su citación como imputado es una "oportunidad" para "poder manifestar la verdad", pero subraya que "el daño está hecho": "Hoy a las ocho de la mañana lo primero que me dijo un vecino, además de saludarme, fue: 'Estás imputado, ¿qué pasó?'. La gente no sabe distinguir, no es licenciada en Derecho".

Tras haber sido llamado a declarar como imputado, el alcalde no descarta incluso formular una queja ante el Consejo General del Poder Judicial por esta instrucción. "Todo se andará", dejó en el aire. Y al ser interpelado por la imagen de Lugo tras los graves asuntos investigados en operaciones como la Carioca -presunta mafia policial que en connivencia con proxenetas explotaba sexualmente a decenas de mujeres- o el caso Campeón -supuesto fraude de subvenciones de la Xunta que ha enviado a la cárcel al popular empresario lucense Jorge Dorribo-, el socialista afirmó que, aunque es preciso que se "persigan los delitos", los sumarios "no pueden estar abiertos in eternum". "No es de recibo lo que está pasando con esta casa, ni con mi persona", insistió.

Orozco sostiene que la denuncia del colectivo Alpul no se sostiene. "¿Los ciudadanos de Lugo creen realmente que aquellas personas que se dedicaron, ya no digo horas, sino días, meses, a estudiar el plan, van a ser comprados por una pequeña cantidad de dinero que puede ofrecer el alcalde con la productividad?", se preguntó el alcalde de Lugo, quien defendió que estas remuneraciones fueron un "gesto" para pagar "el enorme trabajo que hicieron [estos trabajadores] fuera de sus horas para que Lugo contase con un Plan Xeral de Ordenación Municipal".

El regidor sostiene que no tiene "nada que ocultar" y que el próximo 20 de septiembre dará "las explicaciones pertinentes ante la juez" Pilar de Lara Cifuentes. "A mí me votaron los vecinos de Lugo y, por lo tanto, tendrán que ser los vecinos, a no ser que haya algún tipo de persecución política contra mi persona, quienes me echen de la alcaldía", concluyó Xosé López Orozco.