El jefe de la Guardia Civil de Lugo dice que no conocía la trama de los burdeles
Gonzalo Borrás sigue imputado en la Operación Carioca tras su declaración
El teniente coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Lugo, Gonzalo Borrás, declaró ayer que desconocía que agentes del instituto armado, imputados en la Operación Carioca, tuvieran algún vínculo con la prostitución. Todo el interrogatorio de la juez que dirige este operativo, que duró más de cuatro horas, giró en torno a sí conocía esas implicaciones.
Preguntado sobre el cabo Armando Lorenzo, dijo que conoció su relación con el operativo en el momento de ser detenido, en octubre de 2009. Sobre el cabo recaen varias de las imputaciones que constan en el sumario: de inducción a la prostitución, agresión sexual, falsedad documental, cohecho, omisión del deber de perseguir delitos, descubrimiento y revelación de secretos, tráfico de influencias, actividades y negociaciones prohibidas a funcionarios y prevaricación. Lorenzo y uno de los proxenetas de los cinco clubes investigados, José Manuel García Adán, serían los dos principales actores de esta trama.
El mando sostiene que no sabía que dos compañeras habían denunciado la trama
Hay ya más de 20 agentes implicados en el sumario judicial
Poco antes de las 11.30 horas acudía a los juzgados el mando policial, acompañado por un abogado del Estado y también guardia civil. Se paró con la prensa, que le esperaba en la entrada, pero evitó hacer ningún tipo de comentario. Tan solo dijo que estaba "tranquilo" pese a la imputación por la que fue llamado a declarar, la omisión del deber de perseguir delitos. La titular del juzgado de Instrucción número 1, Pilar de Lara, la mantuvo tras el interrogatorio.
Tuvo que esperar media hora. En la pequeña oficina de la juez le esperaban el fiscal jefe de la Audiencia Provincial, Javier Rey, y los abogados del cabo Armando Lorenzo y del hoy coronel José Herrera-Lora, con destino en Canarias, también imputado. El interrogatorio duró más de cuatro horas y media y la declaración se recogió en 16 folios firmados por el mando. A las cuatro y media salían Borrás y su abogado de los juzgados de la plaza de Avilés. El jefe de la comandancia de Lugo se encontró con la investigación ya abierta cuando tomó posesión, un mes después de que De Lara Cifuentes pusiese en marcha el operativo.
El interrogatorio se volvió más difícil cuando la juez le preguntó por un informe con fecha de junio de 2005, en el que dos agentes femeninas de la unidad Emume (Equipo de la Mujer y el Menor) del instituto armado dieron cuenta a sus superiores de las actividades "ilícitas" de Lorenzo. Borrás respondió que desconocía la existencia de dicho escrito, pero en ese momento era comandante. También negó que tuviera conocimiento de otro, sobre este particular, que se remitió desde la unidad de asuntos internos con base en Madrid.
El documento se apoyaba en las quejas de los trabajadores de los servicios sociales del Ayuntamiento de Lugo, porque supuestamente el cabo estaría utilizando los pisos de acogida a mujeres maltratadas para refugiar allí a prostitutas extranjeras, brasileñas sin permiso de residencia en su mayoría, de los clubes investigados.
Borrás también declaró que él no le "cierra la puerta" a nadie, cuando se le inquirió por sus relaciones con los agentes comisionados de Lugo que investigan la trama y que se quejan por el trato que reciben en la comandancia. Se le preguntó, además, si le constaba una relación de amistad del anterior subdelegado del Gobierno, Jesús Otero, con el cabo Lorenzo. Respondió que no. A Otero también se le imputa la omisión en el deber de perseguir delitos. El exsubdelegado del Gobierno se negó a prestar declaración ante la juez hasta que no se celebre la vista oral.
Casi todos los mandos de la Guardia Civil de Lugo ya han pasado por la oficina de Pilar de Lara Cifuentes, como imputados o como testigos. Son más de 20, entre agentes del instituto armado, policías nacionales y policías locales, los imputados en esta causa por la que actualmente solo se encuentra encarcelado el encargado del club Queen's, José Manuel García Adán.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.