Las Cortes exigen al Gobierno la reforma de la financiación local
El PP rechaza las enmiendas de la oposición, que pedía compromisos al Consell
Las Cortes Valencianas, con los votos del PP y la negativa de la oposición, aprobaron ayer una proposición de ley -tramitada por vía de urgencia por el consejero y portavoz popular, Rafael Blasco- para exigir al Gobierno central la reforma de la financiación local.
La iniciativa, defendida por el popular César Augusto Asencio, recoge además los planteamientos de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que ayer estuvo ausente del debate. La propuesta aprobada por las Cortes pide que se revoquen las limitaciones al endeudamiento de los municipios, cuya deuda supera el 75% de sus ingresos; que se aplique una línea de crédito en condiciones preferentes a los Ayuntamientos para que paguen sus deudas a empresas y autónomos y que se establezcan medidas complementarias para que puedan hacer frente al gasto corriente de los próximos tres meses. Se reclama, además, una reforma de la financiación local.
El PP rechazó de plano una enmienda socialista que reclamaba medidas concretas al Gobierno central, incluida la reforma del sistema, pero que también exigía a la Generalitat que asumiese sus responsabilidades, como la creación de un fondo de cooperación local o el pago de sus deudas pendientes en el plazo de dos meses.
El popular César Augusto Asencio y el portavoz Rafael Blasco descalificaron la oferta realizada el día siguiente por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de pactar un nuevo sistema de financiación local. Y, además, evitaron entrar a discutir las propuestas socialistas que obligaban a la Generalitat. "Zapatero con sus embustes ha provocado el agujero y ahora nos sorprende con un nuevo truco par ganar tiempo", indicó Asencio.
El socialista Joaquim Puig aseguró que el único interés del PP era aprobar una iniciativa parlamentaria contra Zapatero. "Nosotros somos más exigentes con el Gobierno, pero ustedes no quieren ningún acuerdo, solo quieren desgastar a Zapatero", dijo Puig. Por su parte, el diputado de Compromís Josep María Pañella acusó al propio Blasco de haber prometido 3.000 millones de euros para los Ayuntamientos que no están en ningún sitio. El parlamentario de Esquerra Unida Lluís Torró acusó al PP de presentar una propuesta para sacar "provecho partidista y propagandista".
En la sesión de ayer el PP también rechazó las enmiendas a la totalidad de la ley de Protección Civil.
Publicidad institucional y poco control
El PP se escudó ayer en la crisis económica para rechazar la creación de una comisión que coordine y fije los criterios de la publicidad institucional del Consell. El objetivo de esta comisión, que debería estar constituida desde 2004, es garantizar la eficiencia de las campañas publicitarias institucionales y dificultar su uso partidista.
La proposición socialista, apoyada por Compromís y Esquerra Unida, fue defendida por el diputado Manuel Mata, que argumentó que su iniciativa pretende garantizar que los valencianos no sufraguen las "locuras" del Consell. Según Mata, en la precampaña de las elecciones autonómicas de 2007 la Generalitat se gastó más de ocho millones de euros en publicidad institucional, un negocio en el que participó la trama Gürtel. Mata dijo que la comisión no se crea porque al PP "no le da la gana".
Para el diputado socialista, la próxima campaña publicitaria del PP debería ser para "pedir perdón por los 500.000 parados, por Gürtel, porque la fórmula 1 iba a ser gratis" y un largo etcétera de razones.
La portavoz del PP Alicia de Miguel justificó su negativa a crear la comisión por "criterios de eficiencia y eficacia, y de prioridades". De Miguel dijo que la Dirección General de Promoción Institucional ya tiene entre sus funciones controlar la publicidad institucional.
Las diputadas de Compromís Mireia Mollà y de EU Marina Albiol acusaron al PP de confundir la publicidad institucional con la propaganda partidista.
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