Cospedal prioriza la cuenca cedente sobre la receptora en el Tajo-Segura

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, fue ayer clara como el agua. En un trasvase, la cuenca que cede el agua tiene prioridad sobre la cuenca receptora, dijo, e insistió en que Castilla-La Mancha "tiene derecho a disfrutar del agua del Tajo" igual que otras regiones con los ríos que pasan por sus territorios.

Las palabras de Cospedal se dan de bruces con la postura política defendida por el PP valenciano y su presidente, Francisco Camps, en trasvases como el del Ebro. La también presidenta del PP en Castilla-La Mancha hizo estas declaraciones en Talavera de la Reina, durante una visita a las riberas del río Tajo en esa ciudad.

Cospedal defendió como bueno y necesario un Plan Hidrológico Nacional para España y para Castilla-La Mancha como herramienta que garantice "el acceso al agua de todos los ciudadanos", y lamentó el retraso en la elaboración de los planes de cuenca de los ríos y el expediente abierto por la Comisión Europea a España a raíz de este retraso.

Asimismo, argumentó la prioridad de la cuenca cedente sobre la receptora de trasvases cuando afirmó que "Castilla-La Mancha tiene derecho a disfrutar del agua del Tajo" del mismo modo que los ciudadanos de otras regiones tienen a hacerlo de los ríos que pasan por sus territorios.

Por otra parte, la dirigente popular admitió compartir "muchas aspiraciones" con la plataforma en defensa de los ríos Tajo y Alberche de Talavera de la Reina, pero matizó que "otras cuestiones" no las comparte.

Estos puntos de discrepancia son la configuración de un Plan Hidrológico Nacional en cuanto que "los ríos no tienen fronteras y el agua tiene que ir desde donde sobre hacia donde falte".

Según la responsable del Partido Popular, "todos los puntos que entren en contradicción con esta máxima serían más discutibles".

El trasvase Tajo-Segura ha enfrentado el último año a la comunidad manchega con la valenciana e incluso a partidos políticos del mismo signo. Cospedal tuvo que hacer más de una pirueta política para defender la caducidad de este trasvase, del que se benefician los valencianos.