El PCA da de baja a Concha Caballero

El Partido Comunista de Andalucía (PCA) ha dado de baja a la portavoz parlamentaria de IU, Concha Caballero, por no renovarse el carné ni pagar las cuotas, según confirmó ayer el secretario general de Sevilla, Juan de Dios Villanueva. Caballero, referente del sector crítico al coordinador y candidato a la Junta, Diego Valderas, dio un portazo hace dos meses y decidió renunciar a figurar en las listas de la federación en estas elecciones, después de ser cuestionada por la cúpula de IU, en la que el PCA es mayoritario. Durante esta legislatura ha sido la cara de la reforma del Estatuto de autonomía y uno de los activos más sólidos de la organización.

Villanueva explicó ayer que la todavía portavoz debía de haber renovado el carné antes de diciembre de 2006, tal y como se acordó en un congreso celebrado el año anterior, para actualizar el censo. "Se le hicieron dos requerimientos y yo personalmente me dirigí a ella para recordárselo. Ante la falta de respuesta, a principios de 2007 estaba ya fuera del partido", resumió el dirigente comunista. No obstante, fuentes cercanas a la afectada desmintieron las llamadas de atención y añadieron que, en cualquier caso, no es habitual rescindir la militancia por impago de recibos.

Según estas firmas fuentes, Concha Caballero se dio cuenta de que no pertenecía ya al PCA hace poco, al dejar de recibir información y citaciones. La dirigente crítica no tiene intención de recurrir ni pedir el reingreso.

El desencuentro de Concha Caballero y el aparato del PCA viene de antiguo. En muchas ocasiones se ha quejado de la falta de soberanía de IU de Andalucía y de la dependencia del propio Valderas respecto a las estrategias del presidente del PCE, Felipe Alcaraz, en su oposición al coordinador federal, Gaspar Llamazares. En plena crisis de la confección de las candidaturas llegó a decir que el PCA estaba "mangoneando por arriba" y "tirando por la borda" el trabajo intenso de cuatro años, con importantes aportaciones sociales y logros como el Estatuto. "Es todo penoso y lamentable", señaló, y atribuyó a Valderas un "silencio cómplice porque no ejerce como coordinador de IU, está también tutelado por el PCA". Forjada en la ortodoxia comunista, la crisis que arrastra IU desde hace una década y el papel cada vez más hegemónico del PCA dentro de la federación han ido alejando a Concha Caballero.

De hecho, en los dos últimos años los episodios internos más tensos dentro de la organización se han producido según esta nueva correlación de fuerzas: el PCA frente a los críticos, y a la inversa. La división es aún más clara en el federal, donde la contestación interna a Llamazares se ha conformado en torno al PCE, con la elección de Felipe Alcaraz como presidente, un cargo inusual en la tradición comunista, que ocupó excepcionalmente Dolores Ibárruri, Pasionaria. Llamazares tiene previsto proponer tras las elecciones a Concha Caballero responsable autonómica del Consejo Federal.