Garbajosa continúa gafado

Los médicos de los Raptors de Toronto detectaron "algo extraño" en la última de las dos resonancias magnéticas mensuales con las que siguen la evolución del tobillo izquierdo de Jorge Garbajosa. El pívot español está ahora a la espera de ser examinado por un especialista. El pasado martes había participado con absoluta normalidad en la sesión de tiro previa al partido que los Raptors perdieron en Dallas (105-99, 32 puntos del alemán Dirk Nowitzki). Sin embargo, en ese encuentro Garbajosa ya fue incluido por su equipo en la lista de jugadores inactivos. Ayer tampoco pudo siquiera vestirse de corto en el encuentro que jugó la pasada madrugada en la pista de los Grizzlies de Memphis. Tanto los Raptors como Garbajosa desean evitar cualquier riesgo y el jugador no volverá a la actividad hasta que los médicos no despejen la incógnita sobre su lesión.

"La resonancia muestra algo que es un poco diferente de lo que debería ser, pero esto no significa que no esté bien. Los médicos han hecho un gran trabajo. Hace dos días me preguntaron cómo me sentía y les dije que igual que ahora, que no tengo dolor, pero no significa que no pueda tener problemas en el futuro", manifestó Garbajosa al periódico canadiense Toronto Sun. El pívot madrileño se lesionó de gravedad a finales del pasado marzo, en la visita a la cancha de los Celtics de Boston. Garbo se lesionó al tratar de taponar a Al Jefferson; cayó mal sobre su pierna izquierda y sufrió una luxación en su tobillo, que le obligó a retirarse al banquillo y salir en camilla de la cancha directo al hospital.

Con la temporada finiquitada, obligado a pasar por el quirófano, apuró sus opciones para participar el pasado mes de septiembre en el Eurobasket con la selección española. La Federación Española tuvo que pagar alrededor de un millón de euros por el seguro que exigieron los Raptors para autorizar al jugador a competir en el torneo. La póliza, que cubre los casi seis millones de euros que debe percibir Garbajosa de los Raptors hasta 2009, expira el próximo 30 de noviembre.

El jugador, que el próximo mes cumplirá 30 años, disputó con normalidad los partidos de pretemporada, a pesar de que los médicos del equipo canadiense eran partidarios de que se operase de nuevo.

También inició la temporada con normalidad pero, de manera inesperada, su entrenador Sam Mitchell -votado como el mejor entrenador de la campaña anterior- dejó de contar con él como hacía el año de su estreno en la NBA, cuando promedió 28 minutos de media por partido. Desde entonces la situación de Garbajosa ha cambiado notablemente: se perdió tres de los últimos cuatro encuentros de la franquicia y anoche tuvo que asistir vestido de calle al partido que iba a reunir por primera vez a cuatro jugadores españoles en una pista de la NBA. Fue el gran ausente del duelo entre Pau Gasol y Navarro, por parte de Memphis, y Calderón por parte de Toronto.

"Hasta que sepamos qué pasa, lo mejor es tener calma y estar tranquilos. La resonancia ha mostrado algo diferente de las pruebas anteriores. No están seguros de que se trate de algo importante. No digo en absoluto que no vaya bien", sentencia Garbajosa, que hasta ahora promedia diez minutos en los siete partidos de 11 posibles en los que ha saltado a la cancha.