La mejor postal de la Alhambra

El mejor mirador para contemplar la postal de la Alhambra está suspendido en el aire. A trescientos metros sobre el privilegiado barrio del Albaicín. En movimiento. Un movimiento calmo, placentero y deslumbrante que ofrece el paseo en globo para sobrevolar Granada, brindar perspectiva sobre sus primitivas callejuelas y ensalzar el monumento nazarí en completo silencio y sin soportar flashes molestos desde terrazas atestadas.

A la temprana cita (7.00 horas, domingo) se apuntan entusiastas novatos. Como Carmen Barrera y su pareja José María, que llevaba un año esperando su regalo de cumpleaños a la espera de las mejores condiciones para volar. Y como Pete y Charlotte Howlett, británicos de luna de miel que una hora después del viaje conservan el gesto de asombro. "Pues una pasada... es espectacular comprobar que estás suspendida en el aire", comentaba Barrera. Los miedos a las alturas de la tripulación se suelen quedar en tierra porque en el aire no hay más referencias que el paisaje urbano entre las atractivas montañas que rodean Granada. "La gente piensa que le va a salir el estómago por la boca, pero nada más salir olvidan el vértigo", comenta Miguel Juliá, responsable de estos vuelos, más frecuentes ahora en verano.

Entre las pocas capitales andaluzas que los globos pueden sobrevolar, Granada ofrece excelentes condiciones debido a los vientos que descienden desde Sierra Nevada hasta la Vega que rodea a la ciudad. "Se supone que no debemos superar los 300 metros por el aeropuerto, pero tampoco descender, con lo que debes pilotar siempre en una línea", bromea Gerardo Checa mientras dispara con el quemador una ráfaga de propano para ascender. No hay rutas previstas de antemano. "Se trata de dejarte llevar. Manejamos al 100% la altura y al 0% la dirección", ejemplifica Juliá.

En el recorrido a cinco kilómetros por hora (180 euros por persona, www.gloventosur.com),

la ciudad se ensancha a los ojos del turista: Sobresale majestuosa la Alhambra, pero también destacan la Abadía del Sacromonte, los impresionantes cármenes y sus jardines, la Gran Vía huérfana de coches, el Hospital Real, el polémico centro comercial Parque Nevada y todos los pueblos del cinturón. Pero las rutas en globo se multiplican en la comunidad, desde el desierto de Tabernas hasta la Serranía de Ronda.