Barreiro logra el refrendo del PP de Lugo pese al retroceso electoral

El presidente provincial del PP de Lugo, Xosé Manuel Barreiro, no tuvo ayer ningún problema para salir indemne del debate interno en el partido sobre los resultados de las elecciones municipales del 27-M, que supusieron para los populares la pérdida de varias alcaldías y de la mayoría absoluta en la Diputación. Barreiro acabó ovacionado y ratificado tras la celebración de una Junta Directiva Provincial en la que nadie planteó la apertura de expediente al todavía presidente de la Diputación, Francisco Cacharro, por sus críticas a la dirección del partido.

Nada más entrar en la sala, Barreiro comprobó que todo jugaba a su favor, tras recibir la primera ovación de los algo más de 100 asistentes a la reunión. Durante una hora, expuso detalladamente los resultados cosechados por el PP. Hubo alusiones muy concretas a las situaciones vividas en Monforte, donde el partido sufrió una fuerte división interna que facilitó la mayoría absoluta del BNG, o Becerreá, un municipio en el que los populares perderán la alcaldía.

En el turno de ruegos y preguntas apenas hubo voces críticas. Uno de los primeros en intervenir fue el reelegido alcalde de Quiroga, Julio González, quien minimizó unos resultados electorales que, según él, "no fueron tan malos" y acabó expresando todo su apoyo al presidente provincial. Lo mismo hizo el vicepresidente en funciones de la Diputación y candidato a la alcaldía de Ribadeo, José Carlos Rodríguez Andina, quien comentó a la salida que Barreiro "no tiene por qué dimitir". "La presidencia del partido está en muy buenas manos. Y la presidencia de la Diputación, también", apostilló en alusión a Cacharro.