El Bernabéu da la bienvenida a Ronaldo

Ruud van Nistelrooy fue padre de una niña en la madrugada de ayer. Abandonó la concentración del Madrid el lunes por la noche para acompañar a su mujer durante el parto y Ronaldo le reemplazó después de cuatro meses sin ir convocado. La presencia del brasileño no se hizo imprescindible durante mucho tiempo, pero Capello decidió que siguiese y lo sentó en el banquillo. Ya entrada la noche, cuando el Madrid sumaba su quinto gol, el técnico debió sentir que a semejante jugador tenerle en el banquillo es como poner a un pura sangre a tirar de un carro. Lo mandó a calentar y entró al campo antes de la media hora de la segunda parte. Al verle, el Bernabéu estalló en un rugido de gozo. El grito de felicidad más atronador que se ha escuchado esta temporada en Chamartín. Por fin, tras dos meses de aridez, sobre la hierba se asomaba un futbolista distinto, el mismo que hace unos meses declaró que le faltaba el cariño de la grada.

Van Nistelrooy se unió al grupo por la mañana para asistir a la charla táctica y ver el vídeo del Dinamo en el hotel. En el partido le tocó abrir el marcador empujando un rechace, tras un tiro de Roberto Carlos. El hombre festejó el gol con el público y con los compañeros, acunando un bebé imaginario.

El siguiente en el turno fue Raúl. El delantero había dicho el lunes que se sentía mejor que con 20 años, pero no necesitó la energía de un cadete para cabecear el magnífico centro que le puso Reyes en el segundo palo. Raúl se dio un festín. Marcó su primer tanto con la camiseta del Madrid desde el 26 de octubre del año pasado, cuando le hizo un gol al Deportivo. El acontecimiento fue digno de un festejo conmemorativo importante y Raúl no desaprovechó la ocasión. Cuando hizo su segundo tanto, el cuarto del Madrid, redobló su entusiasmo posando arrodillado para los fotógrafos. La afición le rindió un homenaje en forma de cántico: "¡Raaauuuuul-Raaauuuuul-Raúl-Raúl-Raúl...!". Instantes después, la grada intentó que Raúl tirara el penalti que supuso el quinto gol. Pero ahí se impuso Van Nistelrooy. También era su noche.

Los goles servirán a Raúl para meter en problemas a Luis Aragonés, que estos días vive sumido en cavilaciones intentando hacer lo que él llama una lista "justa". El seleccionador prepara su grupo de jugadores para acudir a Suecia a jugar un partido fundamental en la clasificación para la Eurocopa. La presencia de Raúl en esa lista ha sido algo de lo que Aragonés no ha estado nada convencido, a la vista del nivel demostrado por el jugador en los últimos partidos que ha disputado. Pero ayer Luis estaba en la grada. Y ayer fue el día de Raúl.