"Me puse a llorar como un crío"

La biografía de Carlos Caszely (Santiago de Chile; 55 años) está intrínsecamente ligada a la historia del Colo Colo, con el que ganó seis Ligas. También a la Copa del Mundo, donde le mostraron la primera tarjeta roja del certamen, en Alemania 74, donde los árbitros estrenaban las cartulinas. "La herida cicatrizó. Menos la muerte, todo tiene solución", relata El Gerente Caszely, su nombre de guerra en el Espanyol. "El apodo del rey del metro cuadrado era mejor. Es que yo era muy bueno en espacios reducidos", relata ufano. Es pronunciar "roja" o derivados y frunce el ceño.

Pregunta. Lo suyo no es plato de buen gusto.

Respuesta. ¡Claro que no! Cuando echaron al argentino Rattin en Inglaterra 66, él decía que el árbitro no le había entendido. Entonces, para evitarse los malentendidos por la cosa de los diferentes idiomas, implementaron las tarjetas amarillas y rojas.

"No entendía nada, Babacan me decía en turco 'asanja landa tirilanda' o algo así"

"El árbitro fue muy drástico, quería quedar bien, pero no pitó más en ese Mundial"

P. Sincérese, ¿merecía irse a la calle?

R. El turco Babacan me expulsó en ese partido, ¡en el primer partido!, porque Berti Vogts, el lateral derecho de Alemania, me pegó mucho, y yo a una que le respondí me echaron. Imagínese cuánto me enojé, porque se decía que Vogts se había preparado para marcar al chileno Caszely y al holandés Cruyff.

P. O sea, que la cartulina le pilló desprevenido.

R. No fui el único, a todo el mundo le extrañó. A una que me revolví me expulsó. Caímos los dos al suelo, y yo para desquitarme se la devolví al perro Vogts. ¡Por algo le llamarían así! Pero Babacan pagó su error. Ya nunca más arbitró ese Mundial. Yo me perdí el siguiente partido, contra la RDA, la otra Alemania. Contra Australia sí pude jugar el último encuentro.

P. ¿Qué se siente cuando le echan así?

R. Te sientes el ser más desgraciado de la Tierra. La cara se cubre de rojo... Es uno de los pocos momentos en que he llorado dentro de un campo de juego, camino del vestuario. Como un crío. Por la impotencia que sentía, estaba tan triste... No se lo deseo a nadie. Ni siquiera intenté hablar con los linieres. ¿Para qué?

P. ¿Y qué le decía usted a Babacan?

R. No le entendía nada, ni él a mí. ¿Qué le iba a decir, si me hablaba en turco? Él hablaba, me decía 'asanja landa tirilanda' o algo así. Ni inglés ni nada. Sacó la tarjeta roja... y ya está. El resto del partido lo vi en la grada.

P. ¿Antes cómo echaban a la gente?

R. Te gritaban '¡out!'. La verdad, no sé cómo se apañarían.

P. ¿Les habían explicado el reglamento?

R. Sabíamos el significado pero no el porqué. Nos habían dicho que no se podía hablar con los árbitros, que con sólo una falta te iban a sacar la amarilla. Lo mismo pasaba si cometías tres o cuatro faltas; por reincidente, te amonestarían. La falta que yo hice era para eso, para amarilla, como reconoció todo el mundo. Por esa regla de tres, a Vogts le tendrían que haber expulsado también. Sin embargo, no vio la tarjeta. De ningún color.

P. ¿No entendería Babacan que era una agresión? Usted se revolvió...

R. El árbitro fue muy drástico, quería quedar bien pero no fue así. No arbitró más.

P. ¿Cómo fueron las muestras de ánimo?

R. Todo el mundo sabía que era una expulsión injusta. 'Chico, te pasó esto como le podía pasar a cualquiera', me decían.

P. ¿Qué se le pasó por la mente cuándo se vio en el cuadro de las dos Alemanias?

R. ¿Qué iba a pensar? Pues que era muy difícil, porque era la mejor RFA de toda la historia. Con Sepp Maier, Beckenbauer, Overath, Gerd Müller... Aun así, sólo nos venció por un gol de Breitner desde fuera del área.

P. Entonces no quedaron mal del todo...

R. No, porque nos ganó la RFA por 1-0, y empatamos a uno con la RDA y sin goles con Australia. No, no. Mal no nos fue.

P. Ese año Colo Colo fue la base de la selección.

R. Siempre lo fue. Un año antes, fuimos subcampeones de la Libertadores. Caímos con Independiente de Buenos Aires, en uno de los robos más grandes de la historia mundial.

P. ¿Cómo fue la clasificación para Alemania 74?

R. Nos clasificamos bien. Antes se jugaba contra dos equipos, no contra todos. A nosotros nos tocó con Perú y Ecuador. Tanto para ese Mundial como para España 82 nos clasificamos muy bien.

P. Hombre, tan bien, tan bien...

R. ¡Ja, ja! Es cierto. A Perú le ganamos en el 74 en Montevideo, en cancha neutral (2-1). Habíamos perdido 2-0 en Lima y logramos igualar en Santiago. Siempre había rivalidad política con ellos, por la Guerra del Pacífico de 1879. Luego las hubo en Chile, de donde me fui. Nunca me han gustado las dictaduras.