La Generalitat pagará dos tercios del Centro del Diseño a cambio de la cesión del palacio de Pedralbes

La Generalitat se ha comprometido este jueves a asumir las dos terceras partes del coste del nuevo edificio museístico que se construirá en la plaza de las Glòries para acoger las colecciones de diseño, artes aplicadas y cerámica. A cambio, el Ayuntamiento de Barcelona le cederá la titularidad del palacio de Pedralbes que, de momento, podrá ser utilizado por el Gobierno autónomo para sus actos de representación y protocolo. El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, y el alcalde de Barcelona, Joan Clos, se comprometieron ayer en la firma del convenio a mantener abiertos los dos museos que acoge actualmente el palacio de Pedralbes hasta que el nuevo museo que debe agruparlos esté terminado.

Con el palacio de Pedralbes ya son tres los edificios históricos que el Ayuntamiento de Barcelona cede a la Generalitat. Recientemente, el alcalde Joan Clos anunció la pronta cesión del edificio del Palau Nacional, sede del Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), y anteriormente había cedido también la titularidad del edificio del arsenal de la Ciutadella, que es la sede del Parlament de Catalunya. En aquella ocasión las condiciones eran muy similares ya que el edificio albergaba también un museo, el de Arte Moderno, centro que sufrió durante varios años la presión del Parlament, que fue reclamando sus estancias de manera insistente hasta que tuvo que cerrar dos años antes de su previsto traslado definitivo al MNAC.

Tanto Maragall como Clos informaron este jueves de que no está previsto que les suceda lo mismo al Museo de la Cerámica y al Museo de Artes Decorativas, que ocupan parte de las dependencias del palacio de Pedralbes. Tanto estos museos como los jardines del palacio seguirán abiertos al público y no se prevé su cierre o traslado hasta que el nuevo edificio que ha diseñado el estudio Martorell-Bohigas-Mackay en la plaza de las Glòries esté acabado en una fecha aún difícil de definir porque no podrán comenzar las obras hasta que el rediseño urbanístico de esta zona esté terminado. La nueva plaza de las Glòries, en la que se eliminará el anillo elevado, tendrá forma rectangular y en su parte subterránea se convertirá en un complejo intercambiador de transportes en el que confluirán líneas de Renfe, de Ferrocarrils de la Generalitat y de metro, además de un túnel subterráneo por el que pasará la Gran Via. El proyecto arquitectónico está prácticamente listo, aunque ayer Josep Martorell reconocía que tendrían que hacerse algunos retoques que, en principio, no afectarán a la forma del edificio, sino a la necesidad de adaptarse a las características del solar en el nuevo diseño de la plaza. El nombre que recibirá este equipamiento está por definir, pero en principio se le denomina ahora Centro Cultural del Diseño y acogerá, además de las actividades de un centro de promoción del diseño y la arquitectura, las colecciones de varios museos, entre ellos los de Cerámica, Artes Decorativas, Textil y de la Indumentaria y las colecciones de artes gráficas.

Clos explicó ayer que en 2005 se creará una comisión mixta para poner en marcha las obras cuyo horizonte no se prevé muy lejano. El Ayuntamiento de Barcelona aportará un tercio de las obras del edificio y la Generalitat los dos tercios restantes, si bien la cantidad aún no se ha determinado.Queda por negociar todavía la posible entrada de la Generalitat en la gestión del futuro centro que promueve el Ayuntamiento en el podrían participar empresas y entidades ciudadanas implicadas.

A partir de ahora la Generalitat se hará cargo del mantenimiento del edificio del palacio de Pedralbes y de los jardines y podrá utilizar este edificio como sede de sus recepciones protocolarias. Una vez puedan trasladarse los museos, se firmará un nuevo convenio que implicará la cesión de la titularidad del edificio.