El Madrid se agarra a Bullock

Sobre el papel no había lugar para sorpresas: el Buesa Arena recibía al líder campeonato. Si sumamos a esto la historia de los duelos entre el Tau y el Real Madrid, parecía asegurado el espectáculo. Y espectáculo hubo. El Madrid, aunque fue por detrás casi todo el partido, decidió al final. Con Maljkovic, parece imparable.

Era de esperar el ritmo endiablado con el que empezó el encuentro y que ambos equipos salieran a dejarse la piel en la cancha. Incluso que la actuación arbitral fuera, cuando menos, polémica. Lo que ya era más difícil de imaginar era que el equipo de Maljkovic fuera a encajar 34 puntos en los primeros 10 minutos.

Y es que si el partido empezó bastante igualado. A medida que transcurría el primer cuarto los madrileños empezaron a perder fuelle. O tal vez, la máquina de Vitoria tirada por Betts y Calderón comenzara a confiarse. La sorpresa para los visitantes llegó con el resbalón del ex baskonista Elmer Bennett, lo que hizo que, lesionado, no pudiera jugar el resto del encuentro. Y el Madrid lo acusó. Pero quedaría Bullock.

El segundo cuarto comenzó con un Real Madrid, si cabe, más concienciado. Los madrileños, que anteriormente habían notado la falta de Bennett, recuperaron terreno. En resumidas cuentas, ese periodo fue más de lo mismo. Ningún balón se daba por perdido y si Macijauskas despuntó entre los de Vitoria, Bullock se llevó la palma entre los de Madrid.

Tras el descanso el Tau seguía por delante, aunque Bullock ya era imposible de parar. Esto, sin embargo, no ayudó a acercar a su equipo a los de Ivanovic. Así, aunque los madrileños siguieron poniendo intensidad, no fueron capaces de igualar el marcador. No fue hasta los últimos momentos de este cuarto cuando el Madrid, que nunca estuvo fuera del partido, comenzó a acortar distancias. De tener una ventaja de hasta 14 puntos, el Tau pasó a tener una renta de seis. Porque si los madridistas nunca dejaron de presionar, los locales perdieron confianza en este cuarto. A esto hay que sumar que cuando Macijauskas estaba en el banquillo el Tau le echó demasiado en falta.

El último cuarto, como era de esperar, comenzó con todo aún por decidir. El Real Madrid se vino arriba, dispuesto a defender ese primer puesto recién estrenado. Mientras tanto, los de Ivanovic iban perdiendo intensidad por momentos. El Madrid se puso por delante cuando quedaban siete minutos para el final. El Baskonia no supo aguantar la presión y los balones que antes había luchado hasta el último segundo ahora los perdía por no tener paciencia. Bajó el ritmo, se precipitó y dejó que los hombres de Maljkovic comenzaran a estar cómodos en la cancha. Y la vuelta de Bullock al partido, decidió. Nadie supo pararlo.