Reaparición poselectoral

Tras un breve paréntesis que ha coincidido, de forma nada casual para la oposición, con la recta final de la campaña electoral, la legionela ha vuelto a aparecer en L'Alcoià, pero también en Castellón.

El miércoles 21, cuatro días antes de la cita electoral del domingo, falleció un enfermo de 76 años de L'Alcora ingresado en un hospital de Castellón debido a una neumonía por legionela. La Consejería de Sanidad no hizo pública la muerte y esperó hasta el lunes, pasado el encuentro con las urnas, para comunicar el fallecimiento.

Un día más tarde del fallecimiento del enfermo de Castellón, el jueves 22, a tres días de las elecciones, la ministra de Sanidad, Ana Pastor, se desplazó a Alcoi, donde desde septiembre de 1999 se han repetido hasta ocho brotes de legionelosis. Desde el mismo epicentro del problema, Pastor instó a los empresarios a cumplir con la legislación de limpieza de equipos que transmiten la bacteria. Ese mismo día se produjo un nuevo caso en la localidad de Ibi pero los responsables de Sanidad insistieron en que no había nuevos contagios. De nuevo pasadas las elecciones, el miércoles, la consejería que dirige Serafín Castellano admitió que el caso de Ibi no era aislado, sino que formaba parte del último brote de L'Alcoià.