El Rayo despide a Benítez tras ganar sólo nueve de los últimos 30 puntos

"Si desciendo con el Rayo, dejo mi carrera de entrenador". Así habló Gustavo Benítez pocos días después de hacerse cargo del conjunto vallecano, en sustitución de Fernando Vázquez. Pero no hará falta que el técnico paraguayo cumpla su palabra. Porque si el Rayo desciende no será con él en el banquillo. El club decidió ayer relevarle de su puesto y confiar en un hombre de la casa, Antonio Iriondo, hasta ahora entrenador del Rayo B, para sacar al equipo del último puesto en la Liga.

Desde la 20ª jornada, cuando Benítez se hizo cargo del equipo, el Rayo ha jugado diez partidos, en los que ha cosechado dos victorias, tres empates y cinco derrotas. En total, ha conquistado nueve de los 30 puntos disputados. Cuando él cogió al equipo era el antepenúltimo, a un punto de la salvación; hoy es el colista y son tres los puntos que le separan del 17º, el que marca el límite de la permanencia.

Benítez se ha convertido en el séptimo técnico destituido en la Primera División, tras Víctor Muñoz (Villarreal), Juande Ramos y Ramón Moya (Espanyol), Manuel Preciado (Racing), Louis van Gaal (Barcelona) y el propio Fernando Vázquez, su antecesor en un banquillo, el del Rayo, que ha visto pasar a cinco entrenadores en los últimos dos años.