Faros inteligentes para ver mejor

Se mueven con el volante para iluminar el interior de las curvas, varían la anchura y profundidad de la luz cuando se circula en ciudad o en carretera y se adaptan a la velocidad y las inclemencias climatológicas (lluvia, niebla...) para ampliar el campo de visión del conductor. Los faros del futuro son ya una realidad y pronto empezarán a incluirse de serie en muchos coches, primero en los más caros y después en los populares. Sus nuevas y espectaculares funciones aprovechan los avances de la electrónica y aplican la inteligencia artificial para mejorar la seguridad y confort del conductor.

Faros coordinados con el navegador

Los nuevos faros inteligentes ya existen y han sido desarrollados por fabricantes como Hella y Visteon. La legislación europea prohibía hasta ahora variar la dirección de la luz de cruce y su intensidad, pero a partir de marzo se permitirá que las cortas puedan girar. Aunque habrá que esperar al año 2005 para que se pueda variar la intensidad de la luz. Y para entonces los faros se comunicarán también con los navegadores para anticiparse a las curvas, activarán los sensores de lluvia o niebla, el control de velocidad y hasta el sistema de visión nocturna. Y se coordinarán con el radar antichoque.

Diodos: más rápidos y duraderos

Las fuentes de luz también van a experimentar grandes cambios. Los expertos aseguran que dentro de tres o cuatro años los diodos o LED desplazarán a las lámparas halógenas y los faros de xenón actuales: consumen menos, duran toda la vida del coche y ahorran espacio. Y se adaptan a cualquier forma y diseño, lo que evitará que los faros tengan que seguir siendo redondos. Además se encienden con más rapidez (ya se utilizan como luz de freno o intermitentes), aunque todavía tienen una potencia lumínica limitada.