Matsuura pide a las universidades que mantengan la cooperación internacional

El director general de la UNESCO, Koichiro Matsuura, pidió hoy a la comunidad universitaria que mantenga la cooperación internacional, después de que la Universidad de París VI solicitara que la Unión Europea deje de financiar la cooperación entre los centros israelíes y europeos. "Invito a la comunidad universitaria a continuar, en todo lugar y en toda ocasión, sus misiones de cooperación internacional, pues más allá de los intercambios intelectuales son portadoras de esperanza y de paz", subrayó el diplomático japonés. "Debemos hacer todo lo posible para preservar las condiciones del diálogo entre las comunidades científicas y universitarias internacionales, pues este diálogo es a veces el último lazo entre pueblos divididos por la guerra y la primera etapa hacia su reconciliación", destacó el responsable de la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

A propuesta del Comité de Solidaridad con las Universidades Palestinas, el consejo de administración de la Universidad de París VI - Pierre y Marie Curie votó el pasado 16 de diciembre una moción en la que pedía que no se renovase el acuerdo de cooperación científica firmado por la UE e Israel. El pasado día 6, varios cientos de manifestantes, entre ellos numerosos intelectuales, protestaron a las puertas de París VI contra la moción, aprobada por 22 votos a favor, cuatro en contra, y seis abstenciones. Tanto el ministerio francés de Educación Nacional, como el de Asuntos Exteriores se desligaron de la iniciativa del consejo. Algunos profesores que la apoyaron explicaron al vespertino "Le Monde" que el Parlamento Europeo condenó el pasado abril la escalada militar del Gobierno de Sharon y pidió a la Comisión Europea y al Consejo Europeo la suspensión del acuerdo de asociación entre la UE e Israel, que incluía la ayuda financiera a la colaboración científica y universitaria. Según el presidente de París VI, Gilbert Béréziat, el polémico texto final del consejo fue fruto "de un compromiso" con los partidarios del boicot, pues si bien pide la suspensión de financiación inter-centros, votada previamente en el Parlamento europeo, incluye un llamamiento para reforzar los contactos directos entre investigadores europeos e israelíes.