Los bibliotecarios reconocen que los restos complican la gestión del centro
El Colegio Oficial de Bibliotecarios-Documentalistas de Cataluña hizo público ayer un informe técnico realizado por una comisión integrada por arquitectos y bibliotecarios sobre la viabilidad del proyecto presentado por Soria y Cáceres. En él se destacan los puntos fuertes y débiles del estudio de los arquitectos encargados del proyecto de la biblioteca en el Born. Entre los primeros figuran 'la singularidad del conjunto arquitectónico, el valor emblemático de los elementos que allí conviven y el sentido simbólico de su integración en un equipamento fundamental para la integración social'. Entre los segundos, la falta de posibilidad de crecimiento de la biblioteca y el hecho de que 'los espacios ocupados por los restos complican la gestión y encarecen el mantenimento del equipamiento'.
Esta comisión, que redactó el informe el 10 de julio, considera que el proyecto de Soria y Cáceres 'es respetuoso con la estructura original de Fontseré, integra, con la natural dificultad, los restos arqueológicos y, en general, permite que se pueda desarrollar correctamente el programa de biblioteca pública'. Cree, sin embargo, que deben garantizarse los 15.000 metros cuadrados de biblioteca -el nuevo proyecto asegura 14.000-, que los restos se integren en la biblioteca 'al margen de cualquier otra consideración' y una sola gestión para el edificio.
Los arquitectos explicarán hoy su proyecto en un debate que se realizará en el Colegio de Arquitectos de Cataluña (plaza Nova, 5, a las 20.00 horas), acompañados de Josep Antonio Acebillo, Josep Llinàs, Josep Maria Montaner y Gabriel Ruiz Cabrero. El informe será evaluado por las instituciones y según señaló ayer el alcalde, Joan Clos, lo estudiarán a fondo 'más allá de la primera impresión gráfica'. La decisión final, indicó, se tomará antes de acabar el verano.
