Andalucía recorta un 67% el gasto en dos fármacos caros al controlar su prescripción

La Junta de Andalucía ha ahorrado en ocho meses 7,88 millones de euros al someter a un control adicional dos de los antiinflamatorios que más pesan en la factura farmacéutica española. Los medicamentos son Vioxx y Celebrex, dos fármacos indicados contra la artrosis y artritis, pero cuyo uso se extendió espectacularmente debido a que no provocan molestias gástricas. El ahorro se debe al permiso especial (visado) que la sanidad andaluza impuso el 1 de septiembre de 2001 al Vioxx y Celebrex. Con este sistema, la prescripción de estos fármacos se redujo un 67%.

El sistema de visado se usa e...

La Junta de Andalucía ha ahorrado en ocho meses 7,88 millones de euros al someter a un control adicional dos de los antiinflamatorios que más pesan en la factura farmacéutica española. Los medicamentos son Vioxx y Celebrex, dos fármacos indicados contra la artrosis y artritis, pero cuyo uso se extendió espectacularmente debido a que no provocan molestias gástricas. El ahorro se debe al permiso especial (visado) que la sanidad andaluza impuso el 1 de septiembre de 2001 al Vioxx y Celebrex. Con este sistema, la prescripción de estos fármacos se redujo un 67%.

El sistema de visado se usa en España para otros casos, como la dispensación de pañales para adultos o algunos medicamentos de enfermos crónicos. Consiste en que el médico debe justificar la prescripción mediante un informe, que ha de recibir el visto bueno de un servicio de inspección.

El peso de los antiinflamatorios se hace notar en la factura del Sistema Nacional de Salud y no sólo en la andaluza. Ambos medicamentos, pese a que no llevan en el mercado más de tres años, supusieron en 2001 el desembolso de 24.000 millones de pesetas (144 millones de euros), cerca del 2% del gasto farmacéutico de España.

En España se estima en tres millones de personas el número de enfermos de artrosis y artritis. De éstos, 700.000 viven en Andalucía. El Sistema Andaluz de Salud impuso el control al detectar que los médicos prescribían Vioxx y Celebrex para tratar hasta 30 patologías distintas, cuando su ficha técnica (las especificaciones aprobadas por el Ministerio de Sanidad) sólo recomiendan su uso para artritis o artrosis. Esguinces, lumbalgia, tendinitis, hernias y dolor de cabeza son algunas de las aplicaciones descritas en el largo listado de enfermedades para las que los médicos recomendaban los citados antiinflamatorios. 'Incluso, tenemos la sospecha que alguien había promovido también ensayos clínicos oncológicos a fin de averiguar si los coxib (el principio activo del Vioxx y el Celebrex) propiciaba algún beneficio terapéutico en este sentido', afirman en el servicio andaluz.

Aparte de la falta de autorización de la Agencia Española del Medicamento, el problema del uso indiscriminado de estos fármacos es su precio. Mientras que un tratamiento con un antiinflamatorio normal le cuesta a la sanidad pública andaluza 1,17 euros diarios de media, con Celebrex o Vioxx el precio se dispara hasta los 1,35 y 1,59 euros respectivamente. La industria responde que sus productos evitan el gasto en un protector estomacal, habitualmente usado con otros antiinflamatorios. Los fabricantes calculan que este gasto llega a los 54.000 millones de pesetas (más de 324 millones de euros).

Pero la Junta ha estudiado el problema y ha comprobado, en una muestra de 265.024 pacientes, realizada entre enero de 2001 y febrero de 2002, que sólo al 33% de los pacientes que tomaban un antiinflamatorio normal consumía, además, un protector estomacal, frente al 21% que sí recibía, además del Vioxx o el Celebrex, el correspondiente protector. Es decir, el SAS ha hecho cuentas y ha concluido que los coxib, con protector estomacal incluido, le cuestan 2,57 euros el Vioxx y 2,32 euros el Celebrex, frente a los 1,41 euros de media que le cuesta cualquier otro.

La batalla del gasto

La batalla para contener el gasto farmacéutico, que a finales de abril acumulaba ya un incremento del 11,99% de media estatal (un 8,67% en Andalucía) frente al mismo periodo del año anterior, requiere, aseguran en la Junta, 'este visado, sin ningún género de dudas'. Fuentes del Ministerio de Sanidad confirmaron que la imposición del visado de las recetas había sido recurrido. 'Se trata de una competencia de la Dirección General de Farmacia', indicaron.

Los laboratorios Merck Sharp & Dohme y Pharmacia, fabricantes del Celebrex y Vioxx, reconocen que la medida ha frenado la creciente dispensación de los fármacos. Pharmacia, la fabricante del Celebrex, calcula que en los cuatro primeros meses de este año las ventas de su producto han bajado un 27,5%. 'Además, de la exigencia del visado, los farmacéuticos de distrito de la Junta han desaconsejado en muchos casos su uso, y seguro que eso ha influido en el descenso', indicaron.