Woods, camino de otro triunfo en el torneo del Mundial 'match play'

Sergio García chocó el viernes por la noche en octavos de final, con David Duval y perdió. Miguel Ángel Jiménez chocó ayer, en cuartos, con Davis Love III y también perdió. Ningún español llegó a semifinales del primero de los cuatro torneos match play, el Andersen Consulting, que componen el nuevo circuito mundial de esta modalidad que se disputa por hoyos. Tiger Woods, en cambio, sigue imbatible. Precisamente jugará hoy la final tras arrasar en semifinales a Love. No habrá la final esperada, entre los dos primeros del ránking mundial, porque Duval cayó ante Darren Clarke. El irlandés ha sido el superviviente europeo en el mundo casi completo estadounidense. En las semifinales estaban él y tres de los cuatro primeros del ránking mundial. Woods (el número uno) no dio respiro en semifinales a Love (4º) y le ganó por una diferencia de cinco hoyos a falta de cuatro. Clarke, un jugador gordo y astuto (19º mundial), sorprendió al mecánico Duval (2º), por cuatro a falta de dos.

Woods, en cambio, sí sufrió demasiado para derrotar en cuartos de final por un hoyo al escocés Paul Lawrie, el sorprendente ganador del Open Británico que no ganó el francés Jean van de Velde. Love no tuvo piedad de Jiménez (le derrotó por tres hoyos de ventaja en el 16º) y Duval, después de eliminar a García, no la tuvo tampoco con su compatriota Scott Hoch, el jugador sorpresa de la semana (cinco hoyos de diferencia en el 14º).

Todo olía a la final soñada, el uno contra el dos. Woods contra Duval. El duelo imposible del año pasado: Duval, la gran esperanza rubia que empezó caliente la temporada y llegó como favorito indiscutible al Masters, pero que se enfrió con la victoria de Olazábal. Incluso permitió también que quien empezara a caldearse fuera el Tigre. Y cuando Woods ya ardía, Duval ni existía. Fue tal su hundimiento que hasta un recién llegado, El Niño, ocupó su espacio en los corazones de los aficionados. Hasta el viernes en que Duval, sufriendo, acabó con la joven amenaza. Después arrolló a Hoch. Pero su resurrección no pudo ser completa al caer ante Clarke. Woods, en cambio, sigue siempre ahí.