El Madrid consigue superar la ausencia de Herreros

La ausencia del lesionado Herreros en el Madrid amenazaba con convertirse en un tormento. O en un trauma, que estas cosas siempre afectan al aspecto psicológico. Fue traumática su falta en Berlín, en el último partido de la Euroliga, pese al buen juego del equipo, y lo fue ayer durante un buen rato. Un rato de 30 minutos, para ser exactos. Pero apareció Alberto Angulo, otro número uno, en su mejor versión para sacar a los suyos del atasco. El Madrid se pasó medio partido en el limbo por culpa de la defensa modélica del TDK, que respondía a cada acercamiento de Djordjevic y compañía al borde del perímetro con un acoso feroz, siempre situando al Madrid en inferioridad. Dos contra Djordjevic, dos contra Angulo, dos contra quien osara asomarse por allí. Perdía el balón el Madrid una y otra vez. Hasta 14 ataques se le fueron de las manos. El TDK le dejó mudo en el lanzamiento exterior, excepto en los minutos finales, y poco importó que el Madrid se pusiera las botas bajo ambos tableros -capturó 39 rebotes por 22 de su rival-.El descanso enseñó un 32-36 más que lógico. El problema del TDK no era otro que el reloj, el tiempo que podría aguantar aquella defensa que rozaba la perfección. No fue mucho. En cuanto Alberto Angulo crispó el gesto y afinó su muñeca el marcador se disparó, con el TDK agotado, con Scott reinando en ambos aros, con Galilea viviendo sus mejores minutos desde que viste de blanco y con el otro Alberto, Herreros, disfrutando de lo lindo allá en el banquillo, aunque fuera vestido de paisano.

Victoria de Estudiantes

La vista a Girona resultó fructífera para Estudiantes, que consiguió resolver en los últimos segundos un partido sumamente igualado (76-78).