Una candidatura a navajazos
María Felicidad Cubo no quiere dejar la política. Nació en León hace 29 años y reside en Quart de Poblet desde que cumplió siete meses. Fue elegida concejal en las pasadas eleciones municipales, pero el PP no cuenta con ella para las próximas candidaturas. Su exclusión ha provocado un oscuro incidente en el que se cruzan denuncias por agresión y querellas criminales a partir de un supuesto navajazo. Lorenzo Sánchez regenta una academia hace décadas. Se incorporó a la candidatura del PP como independiente en las últimas elecciones. Hace unos meses se afilió al partido y ahora es candidato a la alcaldía. No tenía ningún interés en contar con Felicidad Cubo. Ella supo que se caería de la lista y solicitó una entrevista a última hora de la mañana del martes con una excusa convincente, un alto cargo de la Consejería de Bienestar Social necesitaba acordar su agenda con el candidato a la alcaldía para organizar un acto en Quart de Poblet. Sánchez acudió a la oficina del grupo municipal. La administrativa ya había terminado su jornada, de modo que no había testigos. Cubo asegura que comentaron asuntos relacionados con la dirección comarcal hasta que Sánchez se incorporó y le cerró el paso extendiendo la chaqueta. Cubo dice recordar que Sánchez le dijo: "Te tengo en mis manos, tendrás que hacer lo que yo diga". Luego sintió una punzada en la cadera. Antes de desvanecerse, recuerda, notó que el candidato le colocaba una navaja entre los dedos. Despertó en el ambulatorio. Sánchez cuenta que Cubo parecía trabajar en las enmiendas a los presupuestos cuando llegó a la oficina municipal. Comentaron algunas vaciedades sobre el curso de telegenia en el que participó el candidato el lunes hasta que Cubo le mostró una navaja. "Me la ha regalado Luis", dijo ella. Se refería a Luis Brisa, presidente local del PP que acaba de renunciar al cargo debido a su avanzada edad. Sánchez afirma que Cubo le entregó la navaja abierta, que la cerró, la depositó en la mesa y regresó a su casa a comer porque el alto cargo de Bienestar Social no dió señales de vida. Brisa, presidente local del PP, dice que Cubo le llamó sofocada desde el despacho municipal. Cuando llegó, la concejal, que presentaba unos arañazos en la cadera, balbuceaba nerviosa palabras inconexas, hasta que se desvaneció y cayó de la silla desmayada. En las depencias vecinas nadie oyó nada. Brisa interrumpió la comida de Sánchez, que subió al despacho junto a tres miembros de la policía local para tropezar con el cuerpo de Cubo y trasladarlo al ambulatorio. Cuando la concejal volvió en sí, se apresuró a presentar una denuncia por agresión contra el cabeza de lista. Sánchez, por su parte, anunció que interpondrá una querella criminal contra Cubo. Brisa asegura que no entiende lo sucedido, que resulta increíble. Cubo recordaba ayer que ha sido objeto de amenazas en otras ocasiones a través de comunicados y que un joven la agredió el pasado febrero en Picassent. Sánchez afirma que las supuestas misivas partían del ordenador del grupo popular y asegura que la concejal necesita tratamiento. Cubo pidió ayer el ingreso en el Grupo Mixto, de modo que resulta automáticamente expulsada del PP, y lamentaba: "Me duele dejar la política pero irán a por mí, porque el partido tiene que defender al candidato".
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