Los ciscaristas creen que la elección del candidato puede modificar la lista por Valencia
Las negociaciones para decidir la persona del PSPV que se enfrentará a Zaplana en las próximas elecciones autonómicas pueden traducirse en nuevos retoques en la candidatura socialista por Valencia. Los partidarios de Antoni Asunción insisten en que Carmen Alborch es reacia a asumir el reto de ser cabeza de lista pero estaría dispuesta a apoyar la candidatura como número dos. Los partidarios del secretario de Organización del PSOE, Ciprià Ciscar, no descartan ninguna posible combinación, aunque precisan que al no existir todavía cabeza de lista la candidatura se puede retocar.
El portavoz de la gestora del PSPV, Andrés Perelló, ante las especulaciones que se están realizando sobre la persona que encabezará la candidatura por Valencia señaló el jueves que, "se hable lo que se hable de candidatos, será la gestora la que determine la propuesta el próximo martes día 6". "Todo lo demás son apuestas", sentenció Perelló, que reconoció que la presidenta de la gestora, Juana Serna, se reunirá este fin de semana con los ex ministros Antoni Asunción y Carmen Alborch para conocer cuáles son sus intenciones y conocer qué propuesta es la más viable. El portavoz de la gestora señaló que "cualquier información que indique que Asunción o Alborch son el número uno de la lista por Valencia es una mera especulación o sólo expresa la voluntad de algún militante". Partidarios de ambos candidatos dan por seguro que Asunción y Alborch conversarán antes de reunirse con la presidenta de la gestora durante este fin de semana. Sin embargo, las presiones sobre uno y otra arrecian, aunque por intereses y opiniones distintas. Fuentes del entorno de Carmen Alborch reconocieron que un buen número de miembros de la ejecutiva federal del PSOE están presionando a la ex ministra para que acepte ir de número uno por dos razones, por el tirón de su popularidad y porque su presencia serviría para frenar a Antoni Asunción, cuyas críticas a la figura de Felipe González le granjearon el desafecto de buena parte de la dirección del PSOE. Carmen Alborch, que no tiene previsto dar una respuesta hasta el próximo lunes, se resiste a aceptar la candidatura por la división existente en el seno del PSPV, cuyo comité nacional debe ratificar la propuesta el próximo día 7. Pese a sus recelos, la ex ministra es consciente de que debe mostrar su voluntad de apoyar la candidatura, puesto que una tercera negativa -tras retirarse de las primarias a la alcaldía de Valencia y rechazar ser el cartel al Parlamento Europeo- dificultaría sus aspiraciones de repetir en el Congreso de los Diputados. A la ex ministra, distintos miembros de la dirección del PSOE le han prometido todo el apoyo que necesite y libertad para diseñar la campaña electoral. En las candidaturas aprobadas por el comité nacional, que provocaron la dimisión de Romero, figura ya una persona de la confianza de Alborch, la número ocho por Alicante, la independiente Consuelo Catalá. Por otra parte, los partidarios del ex ministro Antoni Asunción reclaman la legitimidad de su candidato para ocupar el primer puesto, ya que quedó segundo en las primarias y ha expresado su voluntad de ponerse a disposición del PSPV y asumir el reto de ser cabeza de lista o, en su defecto, de ir de número dos detrás de Carmen Alborch, que sigue siendo independiente. En función de cómo quede la cabeza de la candidatura, el resto de la lista podría sufrir retoques. La presidenta de la gestora, Juana Serna, indicó el pasado lunes que si no renuncia ningún candidato -hasta ahora nadie ha comunicado su negativa a presentarse como diputado a las Cortes Valencianas- se elevaría al comité nacional una propuesta sobre la cabecera de la lista y el resto de puestos correrían. Este argumento no parece estar sólidamente establecido. Fuentes del sector ciscarista indicaron ayer que al no existir candidato en la circunscripción por Valencia la lista está abierta y, dado que la dirección federal del PSOE no ha dicho nada al respecto, se pueden hacer retoques. En cualquier caso, tanto asuncionistas como ciscaristas parecen decididos a negociar, ya que la propuesta que realice la gestora necesita ser ratificada el próximo miércoles por el comité nacional del PSPV. Una propuesta que fuese derrotada colocaría, aún más, el socialismo valenciano a los pies de los caballos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.