_
_
_
_

Juana Serna preside una gestora del PSPV controlada por ciscaristas y asuncionistas

La responsable del comité de listas del PSPV, Juana Serna, es desde ayer la presidenta de la gestora que gobernará el socialismo valenciano tras la dimisión de la ejecutiva el pasado sábado. El secretario de Organización del PSOE, Ciprià Ciscar, nombró ayer una comisión gestora integrada por 21 personas, con mayoría de ciscaristas y asuncionistas, que regirá el PSPV como mínimo hasta después de las elecciones. La dirección del PSOE decidirá en los próximos días el candidato autonómico. Los ex ministros Carmen Alborch y Antoni Asunción son los que tienen más posibilidades.

La gestora, que finalmente requirió de una negociacion entre Ciprià Ciscar y el secretario federal de Empleo, Joan Lerma, está integrada por Juana Serna en la presidencia, Ángel Franco, Josep Almenar y Carmen Ninet como vicepresidentes, Antonio Moreno como portavoz parlamentario y Andrés Perelló, Olga Mulet, Ignacio Subías, Diego Macià, Consuelo Orias, Antonio Mira-Perceval, Pascual Azorín, Baltasar Vives, Paco Ruiz, Vicent Sarriá, Adolfo Utor, Paco Baixauli, María Antonia Armengol, Concha Andrés, Rosa Morte e Inmaculada Monzó. Con esta composición, la gestora está controlada por los seguidores de Ciscar, Asunción e Izquierda Socialista. El nombramiento de la gestora por parte de la ejecutiva federal, sin consultar al PSPV, generó malestar en las filas renovadoras, que ayer iniciaron los movimientos para intentar coordinar sus próximos movimientos. "La pluralidad no se traduce en proporcionalidad. Es sectarismo puro", señaló un cuadro renovador del PSPV. En el desarrollo de la ejecutiva federal el secretario de Organización, Ciprià Ciscar, llegó a manifestar que está dispuesto a ejercer la disciplina y la autoridad a pesar de los titulares de la prensa. En la sede del PSPV, los miembros de la dimitida ejecutiva pasaron ayer a vacíar sus mesas, mientras que los miembros de la gestora ciscaristas y asuncionistas empezaban a hablar de sus primeras acciones de manera informal. La gestora fue negociada a última hora entre Ciscar y Lerma -que calificó su composición de "bastante equilibrada"- después de que el candidato a la presidencia del Gobierno, José Borrell, instase en la ejecutiva federal a que los miembros valencianos de la dirección intentasen consensuar los nombres. Las intervenciones en el seno de la dirección del PSOE de Josefa Frau y Ana Noguera para que otros miembros de la ejecutiva supervisasen el proceso, al considerar que Ciscar es juez y parte en el conflicto valenciano, fueron rechazadas de plano por el propio Joaquín Almunia. Borrell incluyó también al ex ministro Antoni Asunción, que busca su rehabilitación en las filas del PSOE, entre los candidatos a las elecciones europeas. Sin embargo, fuentes próximas a Asunción -que quedó segundo en las primarias- reconocían el interés del ex ministro por figurar también en las listas autonómicas. El dirigente de Izquierda Socialista, Vicent Garcés, abogó públicamente por Asunción como candidato a la Generalitat, mientras que otros, como el portavoz parlamentario, Antonio Moreno, indicaron que el candidato no tiene porqué salir del proceso de primarias realizado. La ex ministra Carmen Alborch fue la persona a la que se dirigieron todas las miradas, ya que además de su popularidad ha estado fuera de las batallas internas del PSPV. La ejecutiva federal recalcó ayer que no ha conversado con ningún posible candidato y que lo hará en los próximos días. Mientras, en Alicante, Juana Serna -presidenta de la comisión de listas que rechazó la propuesta de la ejecutiva del PSPV y provocó su dimisión- se comprometió a aunar voluntades y negociar con todos los sectores enfrentados. "No podemos vivir en el cabreo permanente, y sin diálogo es imposible que esto funcione", afirmó. Lo primero es organizar el partido para afrontar la contienda electoral, y para eso hace falta encontrar al candidato. El calendario es inamovible: la gestora ratificará primero a todos los candidatos aprobados el sábado por el Comité Nacional del PSPV, y el día 6 se reunirá para elegir al nuevo candidato. Sin embargo, estas listas sufrirán variaciones, ya que varios de los independientes que aceptaron la oferta de Romero para ir en las candidaturas han anunciado que ven muy difícil mantener su compromiso. Hasta entonces, Juana Serna se plantea contactar con todas las sensibilidades del partido, y prioritariamente mantener conversaciones con los candidatos de las tres provincias, incluidos los independientes designados por Joan Romero, para evitar nuevas fugas que complicarían el proceso. "Las listas están legitimadas, todos ellos representan un proyecto y un programa que se mantiene, y el partido los apoyará a tope porque son sus candidatos". Cualquier renuncia que se pueda registrar en los próximos días se entenderá, pues, "producto de una afinidad personal, dado que el contenido es el mismo", aseveró la presidenta de la gestora. ""Mi compromiso es el de la renovación, y hago un llamamiento a los militantes para que ese proceso no sea sólo externo, sino también en clave de democracia interna", añadió. "La lucha legítima es buena, y considero que el ciudadano se desorienta cuando observa que representantes que han trabajado bien en las instituciones salen de la lista con el argumento de la renovación", dijo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_