El Barcelona se aferra al liderato y niega la crisis

Tres derrotas consecutivas, nueve goles en contra y uno a favor, fuera de Europa en noviembre (no ocurría desde hacía cinco años) y el liderato que tiembla. El Barça ha registrado en 10 días dígitos más propios de un colista. Y hasta en la clasificación europea por ordenador, ha descendido del Y al 120 puesto. "No recuerdo yo algo así", admitió Guillermo Amor, el jugador más veterano de la plantilla, con 10 temporadas en Primera División. Una caída de ese calibre sólo se remonta al curso del Motín de Hesperia, antes de la llegada de Cruyff. Pero el dramático paisaje queda siempre atenuado con el paraguas del liderato que niega la crisis. El Barça se jugará mañana la cabeza ante el Celta que, por una vez, es segundo empatado con el Madrid, no será un convidado de piedra (vivió el despido de Cruyff y una pañolada contra Robson)."Es un partido importantísimo para nosotros, para el club, para todo el barcelonismo. Es una prueba de las más importantes de los últimos años. Hacía muchísimo que no vivíamos algo así", confesó Amor. "En otras temporadas, cuando perdíamos siempre reaccionábamos y ganábamos 20 partidos seguidos (aludía al 6-3 que el Barça encajó en Zaragoza para ganar después sin perder ya la Liga. La cuestión es que no llegue el cuarto partido perdido... Ahora es fácil decirlo pero el liderato hay que aprovecharlo".

El plantel sigue dando la espalda a la crisis, pero ayer el presidente Josep Lluís Núñez, su hijo y Louis Van Gaal, el técnico del Barça, almorzaron en un restaurante antes del entrenamiento. No quisieron hablar ante los micrófonos que les aguardaban a la salida del local. La directiva da mensajes de tranquilidad, pero la inquietud es latente.

El holandés pidió refuerzos ya en agosto, cuando se cerró el plazo de inscripción, y no ha cesado de hacerlo. El club se plantea realizar fichajes de urgencia en diciembre. Las alternativas de Davids y Bogarde, ex Ajax que son suplentes en el Milan, parece que han perdido fuerza.

El Barça, sin embargo, ya ha gastado esta temporada 9.200 millones de pesetas en fichajes de jugadores y, si como parece, Núñez accede a las exigencias de Van Gaal, la inversión puede ser tan elevada como el presupuesto (12.434 millones de pesetas). Pese a que la liquidez ha disminuido sensiblemente respecto a anteriores temporadas, el Barça dispone de suficientes recursos para poder financiar cualquier fichaje, porque no tiene deudas y sí una gran capacidad de crédito y de generar ingresos.

Durante la pasada asamblea de socios, celebrada en septiembre, la junta directiva informó de la ampliación de líneas de crédito por unos 6.000 millones -justamente la mitad del presupuesto-, posibilidad que ya tenía concedida por diversas entidades bancarias por valor de 4.000 millones y que no fueron utilizadas.