Descenso en el consumo español

En todo el país, según los datos manejados por la Administración y los industriales, el comportamiento de la demanda de vacuno ha tenido grandes oscilaciones. Mientras en unos casos se llega a hablar de una caída de hasta un 30% en estos días, en otros se apunta que las ventas se hallan estabilizadas sin que se haya notado el impacto. En algunos medios, aunque todavía es pronto para hablar de tendencias, se considera que se ha producido un aumento de la demanda en otros productos cárnicos como el porcino o el pollo.

El secretario general de la Federación de Industrias de la Alimenta...

En todo el país, según los datos manejados por la Administración y los industriales, el comportamiento de la demanda de vacuno ha tenido grandes oscilaciones. Mientras en unos casos se llega a hablar de una caída de hasta un 30% en estos días, en otros se apunta que las ventas se hallan estabilizadas sin que se haya notado el impacto. En algunos medios, aunque todavía es pronto para hablar de tendencias, se considera que se ha producido un aumento de la demanda en otros productos cárnicos como el porcino o el pollo.

El secretario general de la Federación de Industrias de la Alimentación y Bebidas(FIAB), Jorge Jordana, señaló ayer en Madrid que en España no existe ningún peligro por el consumo de carne de vacuno, ya que los industriales realizan prácticamente la totalidad de sus compras en el mercado nacional donde no hay un sólo caso de esta enfermedad.

Por su parte, el presidente de la FIAB y vicepresidente de la CEOE, Arturo Gil, manifestó que el problema del Reino Unido por las vacas locas puede suponer un nuevo planteamiento para la actual Política Agrícola Común (PAC) en el caso del ganado bovino. Arturo Gil aprovechó la ocasión para recordar la escasa solidaridad financiera del Reino Unido con la PAC, de la que, ahora van a tratar de recibir fondos, cuando Bruselas concedía ayudas a otros países.

Cataluña, intranquilidad

Mientras, las organizaciones empresariales del sector vacuno en Cataluña están intranquilas. La enfermedad de las vacas locas, ya ha provocado un descenso inmediato del consumo durante el último fin de semana, que se estima que puede alcanzar el 25% de las ventas, según reconocieron ayer representantes del sector.

En Cataluña, la industria de este sector es claramente exportadora. Cada año se sacrifican 430.000 terneras, de las que 260.000 se consumen en Cataluña y el resto se dedican a la exportación. "Podemos asegurar que en Cataluña no se consume esta carne, por lo tanto no debe tenerse ningún prejuicio de los productos que pueden adquirirse en nuestros establecimientos", señaló ayer el responsable del departamento de Agicultura de la Generalitat, Francesc Xavier Marimon.

Por su parte, Josep Millas, de GREMSA-ANAFRIC, aseguró que "el consumo ha descendido por el tratamiento que se ha dado al caso en los primeros días, sin dejar claro que éste es un problema del Reino Unido". En esta línea, Millas destacó el voto de confianza que supone el comunicado emitido ayer por McDonalds Italia que anunciaba que continuaría abasteciéndose de carne para sus hamburguesas en Cataluña.