González y Aznar inician la batalla electoral con 40 días de adelanto

La campaña electoral del 28-M será a cara de perro. Así lo dejaron entrever ayer los líderes del PSOE y del PP en sendos actos multitudinarios que tuvieron como denominador común la lucha anticipada por el voto. Felipe González, en Madrid, y José María Aznar, en Valladolid, derrocharon pasión en sus discursos y se cruzaron mensajes de desánimo. El líder de los populares hizo un guiño a quienes en 1982 votaron a "una fusión" la de González; éste aseguró que "arrasará".

El inicio de la campaña del 28-M se ha adelantado 40 días. Los principales dirigentes políticos se echaron ayer a la arena para empezar a arañar ya los votos que les permitan conquistar en mayo el gobierno de los ayuntamientos y de 13 comunidades autónomas. En Madrid, ante 8.000 simpatizantes, el presidente del Gobierno, Felipe González, se proclamó ganador de antemano. "Si este partido se pone en marcha no hay quien le gane, volverá a ganar, a arrasar", dijo. "Vandados", ironizó en alusión a las "dentelladas de los jabalíes" de la derecha, que, dijo, "está rabiosa porque lleva 12 años fuera del poder".

En Valladolid, simultáneamente, el presidente del PP reclamaba sin tapujos el apoyo de quienes en 1982 apoyaron a Felipe González de buena fe "y creyeron en una ilusión". Ante 6.000 personas, Aznar también aludió a Jordi Pujol. Le aconsejó "menos arrogancia y más prudencia" en sus palabras y le reprochó que reclame una parte de los fondos del Archivo Histórico Nacional de Salamanca.