Cuando la televisión sustituye al cerebro
Los mitos de Hollywood, recordados en 'Sigue soñando', nueva serie de Canal +
La televisión americana siempre se ha devorado a sí misma. Pero a medida que pasa el tiempo y el medio tiene más historia crece la tentación de volver al baúl de los recuerdos. Es el caso de Sigue soñando, que desde 1990 es uno de los grandes éxitos de la HBO, la cadena de pago más prestigiosa del mundo, y que se estrena hoy (20.30) dentro de la programación en abierto de Canal+. La serie está avalada por once oscars de la televisión por cable y dos premios emmys, y un reparto plagado de estrellas: Bette Davis, Joan Crawford, Groucho Marx o John Casavettes son algunos ejemplos.Producida por John Landis (creador de Thriller, el vídeo de Michael Jackson que hizo historia) e interpretada por Brian Benben, Sigue soñando narra las aventuras diarias de Martin Tupper, un editor de libros divorciado que, obligado a cuidar a su hijo de once años, debe replantearse su vida.
Para resolver los problemas cotidianos, Tupper, un treintañero crecido a los pechos de la televisión, se inspira en los recuerdos de aquellas viejas series en blanco y negro que vio durante su infancia en la pequeña pantalla. Tupper piensa a través de la televisión.
Los clips de las series en blanco y negro se intercalan para matizar festivamente o subrayar el patetismo e indefensión del protagonista. Para Tupper, la televisión es una vieja y desmitificada amiga, conocida desde que tenía pañales. Cuando siente algo, está confuso, siempre encuentra la expresión adecuada en una serie antigua, entre sus personajes favoritos. Hablan por él en cualquier momento Bette Davis, Joan Crawford, Groucho Marx, Anne Baxter, Charlton Heston, John Casavettes, Shelley Winters, Yvonne de Carlo... Y como es una serie con cierto prestigio, no es raro encontrar en un mismo episodio a actores invitados como David Bowie (un productor con lengua viperina), Ricardo Montalbán (un latin lover irredento), Eva Gabor (una buscadora de fortunas), Mimi Rogers o Tom Berenger.
Los viejos clips intercalados para comentar la acción en Sigue soñando tienen también su pequeña historia. La productora MCA tenía en su catálogo un buen puñado de la mejor televisión de los años cincuenta, la llamada edad de oro de la pequeña pantalla. Series como General Electric Playhouse, en la que las figuras más conocidas de Hollyood tenían sus papeles, y un presentador de excepción, Ronald Reagan. Charles Laughton, Myrna Loy y James Stewart estaban en el reparto. Landis dispuso también de las antologías de pequeñas piezas dramáticas. Respecto a estas antologías explica John Landis, el productor de la serie: "Estaba intrigado con este material, y muy sorprendido por los actores que intervenían, pero no quería hacer un simple programa de clips. El desafío fue encontrar algo imaginativo para explotar el material".
Landis se encontró con unas ochocientas horas de programas -de 30 y 60 minutos- dramáticos, muchos de ellos sin especial trascendencia. Pero en estas pequeñas piezas aparecían Alan Ladd, Joan Crawford, Lee Marvin, Jack Benny, Clint Eastwood, Lou Costello, Robert Redford, Vincent Price, Sammy Davis, Groucho Marx, James Stewart o Charlton Heston. Landis decidió utilizar estos fragmentos de viejas antologías televisivas como contrapunto de las acciones y situaciones en las que se ve involucrado el protagonista. Por ejemplo, cuando tiene que comunicarle a su hijo que se va a divorciar, aparece Groucho Marx en blanco y negro diciendo algo tan pertinente como: "El matrimonio es una cosa muy seria".
Como es una serie de la televisión por cable, Sigue soñando no tiene las restricciones habituales de las series de las grandes cadenas. Pero éste es, quizá, paradójicamente, su único lastre: esa ansiedad por demostrar que puede mostrarlo casi todo, y que sólo se entiende en el marco de la austeridad televisiva americana en materia sexual.
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