EL DEBATE SOBRE EL DESEMPLEO

Los países mas ricos buscan medidas contra el paro

Las economías avanzadas salen de la crisis, pero no recuperan, en contra de experiencias pasadas, los puestos de trabajo perdidos durante la recesión. Hasta ahora, los políticos han confiado siempre en que el crecimiento económico traería consigo el empleo. Pero no está siendo así. Y no sólo en Europa. En Estados Unidos, la reacción del empleo al vigoroso crecimiento está siendo más débil que en anteriores recuperaciones y la tasa de paro se resiste a bajar del 6%. En Japón, donde el desempleo no llega al 3%, la amenaza del paro es un problema nuevo. El Grupo de los Siete (EE UU, Alemania, Jap...

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Las economías avanzadas salen de la crisis, pero no recuperan, en contra de experiencias pasadas, los puestos de trabajo perdidos durante la recesión. Hasta ahora, los políticos han confiado siempre en que el crecimiento económico traería consigo el empleo. Pero no está siendo así. Y no sólo en Europa. En Estados Unidos, la reacción del empleo al vigoroso crecimiento está siendo más débil que en anteriores recuperaciones y la tasa de paro se resiste a bajar del 6%. En Japón, donde el desempleo no llega al 3%, la amenaza del paro es un problema nuevo. El Grupo de los Siete (EE UU, Alemania, Japón, Reino Unido, Italia, Francia y Canadá), junto a representantes de la Unión Europea, se reúne durante dos días en Detroit, una ciudad que simboliza la dificil transición económica que afecta al mundo industrializado, para compartir sus experiencias y tratar de buscar soluciones a un problema que ya no se resuelve sólo con políticas para estimular el crecimiento. "En este mercado, las economías pueden crecer, los beneficios de las compañías aumentar, las bolsas subir y, sin embargo, mucha gente puede seguir sin empleo o con un trabajo precario", destacó el secretario estadounidense de Trabajo, Robert Reich, a su llegada a Detroit.El número de parados de los países que integran el G-7 asciende ya a 30 millones de personas. Estos desempleados son el resultado de la reestructuración que están atravesando la mayoría de las economías avanzadas para adaptarse a un mercado más globalizado y competitivo, que fuerza la introducción de nuevas tecnologías y el traslado de la producción a países donde los salarios son más bajos. La receta que desearían aplicar todos los países con éxito y que defiende más ardientemente la Administración Clinton es la de mejorar la formación de los trabajadores. "Salarios más altos para trabajos más cualificados", es el objetivo que plantean los respresentantes estadounidenses a sus socios. La revista The Economist considera que este argumento es utilizado por los defensores del libre comercio para hacer más digerible la apertura de los mercados acordada en el GATT (Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio) del pasado diciembre.

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Pero, además, el problema del paro se manifiesta de forma distinta en los países del G-7 y requiere soluciones distintas.

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