Detroit, a punto de renovar su título tras ganar de nuevo en Portland

ENVIADO ESPECIALUn título de la NBA no se gana sin lágrimas y amarguras previas. El calvario del Lakers de Los Ángeles fue el Bostons Celtics, y el del Detroit Pistons fue el Lakers. Ahora le toca sufrir al Portland Trail Blazers. Hoy se celebra el quinto encuentro de la final de Liga y la realidad es que el equipo del yugoslavo Drazen Petrovic va a ser totalmente humillado por el Detroit Pistons. El Trail Blazers está en una desventaja de tres partidos a uno y dos derrotas consecutivas en casa, la última, el pasado martes por la noche (109-112) en un partido apasionante con un resultado que quita la moral. Nunca se ha remontado una diferencia de tres a uno en una final.

La victoria de Detroit se debe a tres circunstancias: el juego ofensivo de los bases Isiah Thomas, Joe Dumars y Vinnie Johnson, quienes marcaron 78 puntos en otra noche memorable; el dominio en los rebotes y la contribución de los suplentes, que volvieron de nuevo a superar a sus rivales por 26 puntos a 8. Petrovic está resultando ser un factor decisivo en la caída de Portland. Sumó un rebote y una falta en cuatro minutos el martes.

Thomas: "Vinimos a ganar"

La razón fundamental del éxito ha sido la concentración de Detroit en los minutos decisivos. Desde que llegó a Portland, el Pistons han jugado con pinta de campeón y ha superado inconvenientes tales como la lesión del alero Dennis Rodman y las expulsiones por faltas de John, Salley y Bill Laimbeer.El martes, Detroit remontó una diferencia de 10 puntos en el segundo tiempo, un periodo en el que el entrenador de Portland, Rick Adelman, cometió el error de alinear cuatro suplentes a la vez, y también supo solucionar un resurgimiento de parte de Portland cuando éstos presionaron en la defensa y remontaron una diferencia de 16 tantos en el cuarto tiempo.

La ventaja cambió de manos ocho veces en los últimos 5 minutos 25 segundos, y al fin fue el Pistons el que triunfó. Thomas aseguró la victoria al realizar una canasta desde larga distancia, un corte de balón y dos tiros libres cuando restaban 31 segundos, un esfuerzo que puso el marcador a 107-110.

"Fue un partido emocionante", afirmó Thomas, "nos desequilibramos un poco, pero estamos acostumbrados a situaciones difíciles. Aprendimos con el Celtics hace tres años, con el Lakers hace dos. Estábamos preparados y sabíamos qué hacer. El jueves vinimos a ganar".

Thomas fue el mejor anotador de Detroit, con 32 tantos, y por poco gana el partido él solo. Consiguió 22 puntos en el tercer tiempo y encestó cuatro .triples. Todo un récord para un mismo periodo.